Por Claudia Pichuante, Senior Manager de Strategy & Consulting de Accenture Chile
El cambio es constante y se está acelerando más que nunca. Las expectativas de los clientes y los colaboradores han cambiado radicalmente la forma en que las empresas deben trabajar y ofrecer sus servicios. Los directorios están hoy obligados a rendir cuentas sobre cómo operan sus organizaciones de una forma que no se había visto en el pasado.
Para hacer frente a los retos más acuciantes de hoy en día y desbloquear las oportunidades más atractivas, los líderes tienen que actuar con rapidez. Aunque muchos creen que la tecnología innovadora es la respuesta al cambio rápido, sólo es parte de la solución. Las empresas más exitosas elevan a las personas y las sitúan en el centro del cambio. Porque nada cambia si las personas no lo hacen.
Hoy las organizaciones deben crear una transformación que enriquezca la relación entre las personas y la tecnología. En el centro de todo esto está cloud. La nube ofrece a las empresas un cambio radical en potencia computacional, almacenamiento de datos, generación de conocimiento y la accesibilidad a la información. El reto está en encontrar una forma de reunir todo esto de manera que funcione para los empleados en sus actividades diarias. Se trata de darles las herramientas y los conocimientos adecuados, de la manera correcta, a través de los dispositivos y plataformas adecuados.
Así también, debe haber un cambio fundamental en la posición que tiene Recursos Humanos en la organización, pasando de ser un área de soporte al talento hacia un socio estratégico del negocio. La pandemia y la transformación digital ha cambiado el trabajo para siempre. Las empresas se han adaptado y han cambiado sus modelos y procesos. Han tenido que replantearse cómo cuidar la seguridad, la salud y el bienestar de sus colaboradores, cada vez con expectativas más amplias y diversas. Y los trabajadores esperan una relación diferente con sus empleadores. Las reglas se están reescribiendo en tiempo real y esto llegó para quedarse. Ante este escenario, es clave avanzar hacia una experiencia de los colaboradores de calidad, que se refleje en cada momento del ciclo de vida del trabajador y por sobre todo en su día a día. Para esto es fundamental el impulso de plataformas, datos, análisis e inteligencia artificial.
Las operaciones inteligentes de talento ayudan a los líderes de RRHH a maximizar el rendimiento de la fuerza de trabajo, aportando directamente en los resultados del negocio, mientras ofrecen nuevos niveles de valor empresarial. Utilizando el poder de SynOps, por ejemplo, es posible crear experiencias de calidad entregadas en el momento, impulsadas por la tecnología, el compromiso digital y los conocimientos analíticos.
Incluso antes de que se desatara la pandemia, los ejecutivos se esforzaban por adaptar sus estructuras organizativas tradicionales a las demandas empresariales en constante cambio. En un estudio reciente de Accenture, 90% de los ejecutivos a nivel mundial dijo que la supervivencia de sus empresas se ha visto amenazada por modelos operativos que no pueden seguir el ritmo. Ante este escenario, las organizaciones deben impulsar modelos operativos inteligentes, para convertirse en compañías responsables y sostenibles por diseño, adelantarse a la transformación digital y gestionar el crecimiento.
Hoy es el momento para acelerar el crecimiento mediante el cambio, la innovación, y el impulso de mayor confianza y transparencia. La clave es avanzar en esta transformación con foco en las personas, para que las organizaciones puedan alcanzar en conjunto con sus colaboradores la resiliencia que nos exige el cambiante mercado que nos dejó la pandemia.
