Quien haya utilizado los servicios de Cabify, sabrá que, de manera gratuita, la compañía de VTC pone a disposición de los usuarios agua envasada en cartón. Se trata de un formato más sostenible que hace unos meses sustituyó a las tradicionales botellas. De esta manera, la marca reduce el impacto ambiental, sin dejar de ofrecer un valor añadido que la diferencia de otras formas de transporte de pasajeros.
Sin embargo, no es el único producto que los clientes que recurran a este medio de transporte pueden encontrar. A través de Hangry, la única plataforma que posibilita la publicidad, el sampling y la venta de productos en Cabify, muchas marcas están encontrando una nueva manera de llegar a su público.
Desde la plataforma nos cuentan que colaboran con grupos como Mondelez, Gullón, Pepsi o Kelloggs, entre otros. Y en los próximos días empezarán una activación muy potente con Red Bull, que durará 2 meses.
Para las marcas, se trata de un nuevo canal de distribución que maximiza la visibilidad de sus productos. Durante el viaje, es relativamente fácil captar la atención del usuario, que no está expuesto a demasiados estímulos, salvo el del omnipresente smartphone. Pero precisamente el smartphone puede ser el perfecto aliado en esta estrategia, como demuestra la activación de Yves Saint Laurent con motivo de la celebración de San Valentín.
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Por otra parte, para los pasajeros puede suponer satisfacción de sus necesidades en el momento perfecto, on-the-go, sin necesidad de desplazarse. Ya sabemos que el tiempo es oro, pero, si el cliente además recibe una muestra gratuita de un producto, el ahorro es mayor.
Finalmente, este canal de distribución ofrece a los conductores una fuente de ingresos adicional, aunque algunos de ellos indican que «sólo los jefes de equipo incorporan estas cajas».
