Según la publicación del portal CDM Sport
Pasión Ciclista, la segunda tienda de bicicletas más grande España, ha iniciado este 2023 con el firme propósito de reforzar su división de servicios al consumidor. Su máximo responsable, Pedro Ruíz, se ratifica en su objetivo de “ofrecer al cliente ciclista el entorno experiencial más completo posible”.
Pasión Ciclista abrió las puertas de su megatienda de 2.100 metros cuadrados de superficie total a mediados de junio del año pasado. Cerca de nueve meses después, su máximo responsable, Pedro Ruíz, anuncia que este 2023 el objetivo del establecimiento es basar su crecimiento “en ser más un centro de ser vicios al ciclista que una tienda de productos para ciclismo”. El directivo subraya que “desde que proyectamos esta megatienda, uno de nuestros objetivos clave fue ofrecer al cliente ciclista el entorno experiencial más completo posible”.
Para este 2023 está previsto ir sumando progresivamente servicios como una cafetería, un departamento de entrenamiento, dinamizar el servicio de asesoramiento en biomecánica y, asimismo, el servicio corporativo de alquiler a hoteles, así como a bodegas”. Sobre este útlimo, Ruíz ha señalado que “esta es una nueva división en la que tenemos puestas notorias expectativas y queremos optimizar su desarrollo”.
IMPULSAR EL ECOMMERCE
Otro de los objetivos para este 2023 de Pasión Ciclista es impulsar las ventas de su ecommerce. Por el momento, éste aporta entre un 4 y un 5% de la facturación total de la enseña. Según ha anunciado el directivo, “tenemos previsto destinar una persona a ese cometido, al objeto de que se ocupe de impulsar la imagen, el atractivo y la notoriedad de nuestra tienda online”.
Pedro Ruíz ha rehusado concretar qué objetivos de incidencia sobre la facturación global debe alcanzar dicho ecommerce y se ha limitado a señalar que “nos hemos propuesto que su incidencia vaya creciendo paulatinamente de modo sostenido y sólido”.
2022 REGRESIVO PERO SATISFACTORIO
Pedro Ruíz ha reconocido que durante el pasado 2022, la facturación de Pasión Ciciclista fue inferior a la registrada en 2021. Por aquel entonces, según el registro mercantil, la empresa obtuvo una facturación de 1,09 millones de euros (excluido el IVA). En 2022, la cifra de ventas retrocedió un 9,5%, en relación a la de 2021, según ha admitido el detallista. Ello habría supuesto que la enseña registrara una facturación de unos 991.000 euros.
Pese a ello, Ruíz ha valorado satisfactoriamente los resultados obtenidos el pasado 2022, señalando que “nuestro cambio de local supuso un importante aliado para que nuestra facturación no sufriera un mayor revés. Desde que estamos en la nueva ubicación, tenemos mucho más tráfico de clientes y hemos incrementado sustancialmente nuestra notoriedad, no sólo en Logroño, sino también a nivel de toda La Rioja”.
OPTIMISMO CAUTELOSO ANTE 2023
Sobre el inicio de este 2023, el minorista ha reconocido que “enero fue flojo, pero febrero ha sido el segundo mejor febrero de nuestra historia”.
Pedro Ruíz se ha mostrado “cautelosamente optimista” sobre la facturación de este 2023. Según ha apuntado, “siguen habiendo numerosas incógnitas sobre la situación económica que pueden tener distintos grados de afectación sobre la confianza del consumidor. Vuelve a ser un año de estar muy atentos a las oportunidades y deberemos ser ágiles y eficientes para intentar optimizarlas”.
POCOS PROVEEDORES PERO MUY ALINEADOS
El detallista ha reconocido que en la actualidad han optado por “trabajar con pocos proveedores pero hacerlo con una mayor cooperación”. Actualmente, el surtido de bicicletas del establecimiento y su ecommerce cuenta con modelos de las marcas BMC, Giant, Merida y Orbea. El detallista ha reconocido que “el grueso de la facturación en esta línea de producto lo obtenemos con Orbea y Giant”.
Actualmente, trabajan en Pasión Ciclista siete empleados más la propiedad.
