Neuromarketing: Cómo es que el Cerebro Siente la Felicidad

Mujer con sombrero entre girasoles y burbujas

Nuestra capacidad de disfrutar las cosas buenas de la vida, e incluso de los pequeños detalles que nos dan plenitud y felicidad está en nuestro cerebro y los mensajes que se transmiten una neurona y otra a través de neurotransmisores; y los podemos generar conscientemente.

 

En la publicación anterior comentamos acerca del poder que tienen la Dopamina y la Oxitocina en nuestro día a día y como nuestro cerebro siente la motivación y el amor a través de las diversas actividades que realizamos y que nos ayudan a generar estos dos neurotransmisores.


Banner_frasco-suscripcion-800x250

Quizá es impactante darnos cuenta que la felicidad, al interior del cerebro, es meramente química o el conjunto de reacciones electroquímicas y comunicaciones entre neuronas, pero más interesante aún, saber que esto se puede generar a través de las actividades que hacemos habitualmente y lo podemos controlar, incluso generar nuevos hábitos que contribuyan a este estado cerebral, físico, que crea el ambiente perfecto para albergar una mente sana y feliz.

Hoy es el turno de la Serotonina y las Endorfinas, grandes protagonistas de un estado de ánimo placentero y de una mentalidad de disfrute de la vida y las pequeñas cosas además de generadores de concentración, claridad de pensamiento y enfoque en nuestras actividades prioritarias.

Serotonina.- Mucho se ha hablado sobre la serotonina como el neurotransmisor del buen estado de ánimo. Incluso, es personaje principal en el mecanismo de acción de muchos fármacos antidepresivos y ciertamente, genera un buen estado de ánimo, sin embargo, una de las funciones más relevantes de la Serotonina es que nos proporciona la capacidad de aclarar nuestra mente.

¿Cuantas veces estamos ante disyuntivas en la vida y no sabemos que opciones tomar? No tenemos claridad sino más bien confusión. También hay ocasiones en las que no sabemos realmente que queremos y otras en donde nos sorprendemos haciendo y tomando decisiones con base en lo que otros quieren o esperan de nosotros, aun cuando disten de lo que nosotros preferimos, sin atrevernos a corregir el curso y creando con ello una vida de frustración y pocas satisfacciones.

A fin de evitar esto, podemos basar nuestras decisiones no solo en el sano juicio o el carácter y determinación, (que podrían ser muy difíciles en un cerebro con carencia de serotonina) sino que podemos incrementar nuestro nivel de este neurotransmisor y facilitarnos los procesos de toma de decisiones grandemente.

Aunque pareciera parte de un ritual mágico, generar Serotonina es tan simple como hidratar y oxigenar nuestro cerebro al tiempo que tenemos pensamientos positivos. Si, tomar agua y estirarse al momento de despertarnos, además de vislumbrar el día que comienza como una oportunidad de tener éxito y de manera positiva y optimista provee al cerebro de la suficiente serotonina para mejorar nuestro estado de ánimo y principalmente, con los días, incrementar la claridad con la que vemos los diversos ámbitos de la vida y la oportunidad que representa una efectiva toma de decisiones de acuerdo con nuestros sueños, proyectos y expectativas de vida.

Una nueva investigación muestra donde ocurre la felicidad en nuestro cerebro  - Psicología al Día

Adicionalmente, la sensación de cumplimiento al haber alcanzado una meta también proporciona serotonina a nuestro sistema y obviamente trabaja muy en conjunto con la dopamina. Esta última, como mencionamos en el primer artículo, nos motiva a dirigirnos hacia una meta, mientras que la serotonina se libera una vez que esta ha sido alcanzada. Ambas, nos permiten diseñar una meta clara, perseguirla, alcanzarla y disfrutar de la satisfacción al obtenerla.

Así mismo, la serotonina ayuda a incrementar la satisfacción y cumplimiento en las personas en posición de liderazgo o autoridad, como maestros, coachs, entrenadores y hasta los padres contribuyendo «a ver por los demás», pero lo más fascinante es que el alumno o el hijo, al sentirse cuidado o guiado también la genera. Es por eso que siempre que alguien gana un premio suele agradecer a sus padres, a su coach, a sus maestros, etc.

Este neurotransmisor interviene grandemente en la sensación de felicidad o bienestar y se puede generar como ya mencionamos y también asegurando el consumo de triptófano, el aminoácido necesario para la producción de serotonina.

Algunos alimentos que contienen triptófano: plátano, dátil, pescado, avena, huevo, carne y frutos secos.

Pero más allá de claridad, metas y logros, ¿Quién no disfruta de ser feliz con las cosas simples de la vida?; un amanecer, el juego de los niños, tu platillo favorito…

Ojala la vida fuera tan simple como para sentir esta felicidad todo el tiempo, ¿no es así?

Pues vaya que es posible. Si te cuesta trabajo disfrutar lo cotidiano te estás perdiendo de una sensación bonita que además te inspira para tener paz mental y afrontar desafíos importantes de manera tranquila, incluso, disfrutando de los procesos que nos llevarán al éxito en la solución de cualquier situación.

La felicidad es un camino, dicen, no solo el punto de llegada, no es un lugar. Pues disfrutar de esto es posible gracias a la Endorfina.

La endorfina además de aligerar el dolor físico, provee la sensación de bienestar y a mi juicio es una de las sustancias más «nobles» de nuestro organismo.

¿A qué me refiero con «nobles»? Pues que se pueden generar muy fácilmente: Sé consciente de lo que estás haciendo en este momento… Estás leyendo un artículo… disfruta de tu asiento, de la temperatura del ambiente, de la ropa que estás usando, de la sensación que tienes en este momento. Date cuenta que todo está bien en este preciso instante… ¿listo?… Has generado endorfina y en los siguientes minutos tu sensación de bienestar será aún mayor.

Si después de leer este artículo te dispones a realizar alguna tarea, la harás con gusto, disfrutándola. Ni que decir si lo que sigue es hablar con alguna persona; la conversación será más placentera y si había que solucionar algo, llegarás a acuerdos benéficos y disfrutables para ambas partes.

Otra manera de generar endorfina es comer un pedazo pequeño de chocolate, hacer ejercicio, reír, frecuentar a los amigos o la familia, practicar algún pasatiempo, abrazar y sentirnos abrazados, salir a pasear… etc.

Tu bienestar subjetivo, que es otra forma de llamar a la felicidad, sobre todo desde la neurociencia, es totalmente posible a nivel químico dentro del cerebro, lo que lo convierte en un excelente lugar para que habite una mente sana, en paz, con metas y proyectos que lo lleven a alcanzar niveles de satisfacción a pesar de los  grandes desafíos que en ocasiones la vida nos presenta.

Puedes poner tu cerebro a tu favor, ahora sigue elegir los pensamientos y gestionar las emociones  que te llevarán a actuar de tal manera que construyas resultados increíbles en tu vida, pero eso es otra historia de la cual hablaremos más adelante… «Cómo construimos nuestra realidad desde el punto de vista de las Neurociencias».

Banner_azules
Reciba las últimas noticias de la industria en su casilla:

Suscribirse ✉