Un estudio reveló que los comerciales con tono más alto son asociados con productos alimenticios más saludables.
¿Alguna vez has visto un comercial que esté promoviendo comida? ¿Cómo influye en tu decisión de compra la música y las voces que aparecen en el mismo?
Cada vez son más las personas que se suman a la iniciativa de llevar una vida saludable. Esto incluye tener un buen descanso, hacer ejercicio y comer comida saludables.
Es por eso esta razón que las empresas de alimentos se han esforzado en llevar a cabo estrategias de marketing que motiven a las personas a consumir sus productos. De hecho, se espera que el gasto mundial en publicidad aumente un 12% a más de 795.000 millones de dólares para finales de 2022.
Es por eso tan importante que las empresas desarrollen estrategias adecuadas en sus campañas digitales para tener un impacto positivo en sus clientes. Esto va desde el diseño visual hasta el tipo de sonidos que un anuncio conlleva.
La importancia del sonido en los anuncios digitales
El sonido es el sentido humano más rápido, más rápido que el olfato, el gusto, la vista e incluso el tacto. Cuando eso se combina con el hecho de que la música invoca emociones en las personas, un gran impulsor de la lealtad a la marca, la importancia de comprender el impacto del sonido en la marca suena muy claro.
Un estudio realizado por Nanyang Technological University (NTU) Singapore descubrió que los consumidores asocian los comerciales con tonos de voz alto con productos alimenticios más saludables.
Los logos sónicos, también llamados «sogos», son melodías cortas creadas para apoyar la comercialización de una marca específica. El estudio podría ayudar a los especialistas en marketing a seleccionar los elementos audiovisuales óptimos para transmitir mejor su marca.
El estudio involucró a 180 participantes, a quienes se les presentaron sogos ficticios generados por un generador de música aleatoria en línea, o señales visuales, seguidas de un par de imágenes de productos alimenticios, uno saludable y otro no saludable. Se pidió a los participantes que seleccionaran la comida que sintieran mejor con cada sogo que escucharan, lo que los llevó a emparejar cada sogo con una imagen de comida.
El equipo también descubrió que el tempo del audio o el sonido utilizado en los comerciales tenía poco o ningún impacto en las percepciones de los consumidores sobre si los productos alimenticios eran saludables. Sin embargo, los investigadores dicen que el tempo podría estar relacionado con otros comportamientos relacionados con los alimentos, por ejemplo, durante la cena, reproducir música de ritmo más rápido podría influir en los consumidores para que mastiquen la comida más rápido.
En base a estos resultados, la organización propone que los gerentes de marcas resalten la salubridad de sus productos utilizando sogos que tengan una alta frecuencia para mejorar el atractivo saludable de los alimentos. La efectividad de los sogos puede aumentar si se utilizan empaques que sean congruentes o que tengan diseños más vívidos para alentar a los consumidores a tomar decisiones más saludables sin tener que evaluar información compleja, a menudo contenida en las etiquetas nutricionales.
