La compañía de telecomunicaciones líder en México tuvo durante 2019 alentador. De acuerdo con el cuarto reporte trimestral, las ganancias netas de la empresa se dispararon un 28.8% en comparación con el año pasado, ubicándose en 63,331 millones de pesos.

Los resultados de la firma se vieron impulsado por una reducción en los costo de la compañía, y mejores márgenes en sus operaciones en México, Estados Unidos, América Latina y Europa.

La empresa de telecomunicaciones señala que tres de nuestras cuatro operaciones principales reportaron un crecimiento positivo en ingresos en las plataformas fija y móvil; algo que solo una de estas operaciones obtuvo el año pasado.
2019 se trata de un año de consolidación para la compañía, en la que pudo afianzar su posición en el mercado de telecomunicaciones en América Latina y otros mercados. La compañía tuvo incrementos de doble dígito en sus operaciones en Perú, Centroamérica, Estados Unidos y Colombia, mientras que en México aumentó en 5.9% y en Brasil 4.7%

Un gran ejemplo de la diversificación de los mercados esto fue la adquisición del 100% de Nextel Brasil a NII Holdings. Esto le permitirá fortalecer su presencia en el mercado de postpago en las ciudades más grandes de Brasil: Sao Paulo y Río de Janeiro. “Por lo pronto, América Móvil ya consolidó mercados en Centroamérica y Brasil. Eso lo pone como el operador móvil más grande en América Latina”, dice Negrete.

Los especialistas señalan que es poco probable que América Móvil continúe con su estrategia de expansión en el continente, sobre todo por la incertidumbre económica causada por la pandemia de coronavirus, pero no descartan que aproveche alguna oportunidad de negocio.

En febrero, América Móvil anunció que entre sus planes para el 2020 está el lanzamiento de las primeras zonas de cobertura con la tecnología. “En México sí creo que vamos a lanzar al final de este año. En Brasil aún no sabemos, porque va a haber la licitación de espectro y no sabemos exactamente cuándo será”, dijo Daniel Hajj, CEO de la empresa en una conferencia con analistas financieros por su reporte financiero al cuarto trimestre de 2019.

Aunque la pandemia de COVID-19 puede retrasar los planes de implementación de la tecnología, lo más probable es que este año veremos sus primeros pasos en América Latina, aunque para ello no solo bastará la voluntad y la inversión de los operadores, sino del trabajo del sector público.

Desde hace años, el Grupo Sanborns ha reducido su tamaño. Las tiendas que conforman el grupo sufrieron una importante caída en el último trimestre de 2019, de 25%, a pesar de que sus ventas crecieron 6.5% anual (hasta los 17,771 millones de pesos), debido a mayores gastos administrativos y de operación.

Grupo Sanborns es la compañía del Grupo Carso que más está resintiendo las medidas implementadas para para frenar la propagación del nuevo coronavirus en México. Los centros comerciales y las tiendas departamentales han permanecido cerradas, en algunos casos, desde mediados de marzo, lo cual puede significar un duro golpe para las empresas.

El 3 de abril, unos días después de lo que el gobierno llamó la Jornada de Sana Distancia, la firma informó que cerraría las puertas de sus tiendas Sears y Saks así como como la suspensión de actividades de Sanborns Café y en los centros comerciales Loreto y Plaza Inbursa.

Otra firma que cuenta con la inversión de Slim y que sufre de estos cierres es la cadena de artículos asiáticos Miniso. La marca japonesa, en la que Grupo Sanborns tiene puestas sus esperanzas de crecimiento, tenía un agresivo plan que implicaba su doblar su tamaño en México a 2023, no sólo en número de tiendas –que se estimaba llegaría a 400 unidades–, sino también en la capacidad de su centro de distribución y en el número de productos de sus tiendas.

Aunque la cuarentena en México inició hasta el 23 de marzo, los resultados del Primer trimestre de 2020, Grupo Sanborns ya resiente las consecuencias de estas medidas. De acuerdo con su reporte del primer trimestre, la compañía tuvo una caída de 1.4% en sus ventas durante el primer trimestre del año, debido a una disminución en el flujo de clientes a los pisos de venta durante la segunda quincena de marzo.

Hasta la fecha de cierre de esta edición, la fecha de reapertura de las plazas comerciales. Sin embargo, el reinicio de actividades de centros comerciales no garantizará una recuperación de las ventas, advierte Marisol Huerta, analista de consumo de BX+.

Huerta explica que las tiendas departamentales en físico se van a encontrar con un entorno complicado, ya que puede enfrentarse al temor de consumidor al llegar a las tiendas, así como a una crisis económica que seguramente, hará que el consumo caiga.

Para poder detener la caída, Sanborns, Sears y Miniso han tenido que redoblar sus apuestas hacia el comercio electrónico. Huerta explica que muchas empresas de reatil en México vivieron en los últimos meses un desarrollo equivalente al que esperaban en 5 años. “Y en algunos casos, es de 10 años”.

Huerta sostiene que si las empresas quieren ofrecer una buena experiencia de compra a través de sus plataformas en línea, deberán capacitar a su personal para dar atención al cliente. “Es horrible pelear con un robot”.

El 25 de mayo, Sanborns y Sears activaron en sus plataformas en línea la opción de enlazar a los consumidores y a los vendedores de piso a través de mensajería en línea sin salir de la tienda virtual. “La habilitación de la herramienta permite que al momento de realizar la compra, el cliente elija la burbuja de WhatsApp y de inmediato se asignará a un vendedor de piso especializado en el producto en que está interesado”, explicó Grupo Sanborns en un comunicado.

Miniso tuvo que adelantar el lanzamiento de su plataforma de comercio electrónico en México, inicialmente previsto para el tercer trimestre de 2020. “La pandemia ha hecho que tengamos que acelerar nuestros procesos.

Lo que queríamos desarrollar en cuatro o cinco meses, resultó que lo tuvimos que implementar en cinco semanas y vamos a salir con una versión inicial, y de ahí vamos a irla perfeccionando hasta que quede como la tenemos planeada”, dijo Arturo Tishman, vicepresidente comercial de Miniso para Latinoamérica en un comunicado publicado este miércoles.

A pesar de haber dicho en múltiples ocasiones que uno de los propósitos de su gobierno es separar al poder político del poder económico, López Obrador se ha mostrado cercano a Carlos Slim, el hombre más rico de México. Además de adelantar el retiro del empresario en marzo de 2019, el presidente ha tenido a Slim con invitado en una de sus conferencias.

En agosto de 2016, el dueño de Grupo Carso fue uno de los empresarios con los cuáles el presidente anunció que su gobierno y la iniciativa privada alistaban un plan de infraestructura con 1,600 proyectos.

Slim, cuyas empresas fueron golpeadas por la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, informó en una conferencia meses después que prevía inversiones superiores a los 100,000 millones de pesos por parte de Grupo Carso durante este sexenio sólo en infraestructura, en caso de ganar proyectos como un tramo del Tren Maya.

El cálculo le ha salido bien al magnate. Un consorcio integrado por las empresas Operadora Cicsa y FCC Construcción, ambas de su propiedad, fue el ganador del fallo de la licitación para la construcción del Tramo 2 del Tren Maya, que va de Escárcega a Calkini, en Campeche, con una propuesta económica de 18,553 millones de pesos, según informó Fonatur en abril de año.

No es el único proyecto en el que Slim ha ganado. En octubre de 2019, Pemex adjudicó a CICSA y a la compañía Permaducto un contrato para la ingeniería, procura y construcción de dos unidades de infraestructura marina denominadas MALOOB-E y MALOOB-I.
Estas obras se instalarán en la sonda de Campeche, en el Golfo de México, por un monto de 2,418 millones de pesos más 191.7 millones de dólares, de los cuales 1,442 millones de pesos más 69.8 millones de dólares corresponden a CICSA, explicó en un comunicado enviado a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).