Almacenar y resguardar correctamente los datos, mediante infraestructura renovada, es hoy una prioridad para las organizaciones.
Desde siempre, la seguridad de los datos ha sido un tema crucial para las empresas y ahora, más que nunca, en vista de la digitalización, el sostenido aumento de los llamados ciberataques y otras amenazas al correcto almacenamiento y uso de la información. Así lo ratificaron las cifras del programa de investigación Future of Trust de IDC, indicando que el 42% de las organizaciones chilenas aumentarán sus inversiones en seguridad de datos este año, a fin de garantizar confianza a sus clientes. El mismo análisis indicó que en América Latina el 39% de las entidades se sienten más vulnerables a los ataques que antes.
Y es que existe un consenso en torno a que la infraestructura que hasta ahora protegía la operación ya no es suficiente. En este escenario, han tomado protagonismo los data centers que “en palabras simples es una instalación gran tamaño donde se albergan y mantienen numerosos equipos electrónicos que permiten compilar, guardar y proteger toda la información digital”, explica Lorena Meza, directora comercial de SEAL Telecom, compañía referente en soluciones tecnológicas para seguridad electrónica. Lo más interesante es que Chile se ha vuelto un Hub para este tipo de construcciones, pues cuenta con elementos que han impulsado su auge, entre los cuales están el contar con líneas de transmisión submarinas, el desarrollo de energías verdes, la red de 5G pionera en Latinoamérica, entre otros. De hecho “se proyecta que al 2026 se construirán más de 45 mil m2 en el país y, en la última van casi 89 mil m2”, detalla Meza.
Dada la función crítica que cumplen, y que seis de cada 10 empresas consideran la seguridad informática como una prioridad de acuerdo con el antes citado estudio, las empresas están invirtiendo amplios recursos en proteger esas instalaciones mediante tecnología de vanguardia. “Se necesita llevar un control y vigilancia en el acceso a las salas, además de contar con seguridad ambiental en cuanto a temperatura, humedad y prevención de incendios. No se trata sólo de buenas cámaras, controles de acceso y sistemas de evacuación, sino que además todo eso esté integrado en centros que permitan el monitoreo automático y constante para anticiparse a los escenarios”, comenta la ejecutiva detallando que lectores biométricos, barras anti pánico, torniquetes ópticos de barrera deslizante y sistemas de circuito cerrado de televisión son, hoy por hoy, algunas de las soluciones más demandadas.
Las proyecciones de este mercado son auspiciosas. Se estima que para 2025 se generarán alrededor de 463 billones de gigabytes de datos al día y eso sólo aumentará con la masificación del Internet de las Cosas (IoT), ampliando la demanda de plataformas de procesamiento y almacenamiento de datos y, en consecuencia, las innovaciones que permiten resguardarlas.
