Las ventas del sector ibérico de distribución alimentaria se mantendrán

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Las ventas del sector ibérico de distribución alimentaria se mantendrán. Las ventas del sector ibérico de distribución alimentaria, considerando conjuntamente la actividad de hipermercados, supermercados y establecimientos cash & carry, se estima que alcanzarán en 2023 los 133.150 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 7,3% respecto al año anterior.

Este crecimiento se verá impulsado por la subida de los precios, que continuará siendo un factor clave para los operadores del sector a corto plazo. La inflación, los elevados tipos de interés y la incertidumbre sobre los ingresos están llevando a muchos consumidores a recortar sus gastos, lo que está provocando una mayor sensibilidad al precio.

Los retailers tendrán que adaptarse a esta situación ofreciendo precios competitivos, promociones atractivas y productos que satisfagan las necesidades de los consumidores.


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Supermercados y autoservicios, los más beneficiados

La creciente valoración por parte de la población de la cercanía de los puntos de venta continuará favoreciendo el volumen de negocio de los supermercados y autoservicios, que ampliarán su cuota de mercado en 2023.

Los ingresos agregados de este tipo de establecimientos experimentarán una variación en el conjunto del mercado ibérico del 7,7%, hasta los 99.580 millones de euros. Destaca la positiva evolución de los establecimientos discount, que seguirán ganando cuota de mercado.

Las ventas del sector ibérico de distribución alimentaria se mantendrán

El volumen de negocio de los hipermercados alcanzará los 18.330 millones de euros en 2023, lo que supone un crecimiento del 4,9% respecto al año anterior.

Por su parte, el repunte de la demanda en el sector de la restauración motivó en 2022 un fuerte ascenso de los ingresos de los cash & carry, que continuarán creciendo en 2023, aunque a un ritmo menor.

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El sector ibérico de distribución alimentaria se enfrenta a un escenario de incertidumbre a corto plazo, marcado por la inflación, los elevados tipos de interés y la guerra en Ucrania.

Los retailers tendrán que adaptarse a esta situación para seguir creciendo y mantener su cuota de mercado.

Según publicó Foodretail.es