Las rebajas tradicionales pierden atractivo ante la sostenibilidad y la compra consciente. Las rebajas tradicionales, como las de enero, están perdiendo atractivo entre los consumidores españoles. Según datos de Kantar Worldpanel, el consumo en prendas rebajadas ha pasado del 46,5% en 2020 al 31,2% en 2023. Esta evolución se debe a una serie de factores, entre los que destacan la tendencia a comprar menos y sólo ante la necesidad, los mensajes medioambientales que llegan desde organizaciones y marcas, y la consolidación de retailers low cost.
La pandemia de COVID-19 ha provocado un cambio en los hábitos de consumo de los españoles. Tras el confinamiento, muchos consumidores han tomado conciencia de la importancia de comprar sólo lo necesario, para evitar el desperdicio de recursos y la contaminación. Además, los mensajes medioambientales que llegan desde organizaciones y marcas también están influyendo en este cambio de actitud.
Las rebajas tradicionales pierden atractivo ante la sostenibilidad y la compra consciente
Por otro lado, el crecimiento que han experimentado los principales retailers low cost, y la aparición de nuevos, tanto físicos como online, ha cubierto el espacio de los precios reducidos, haciendo redundante la llamada a acudir a las rebajas. Estos retailers ofrecen precios bajos de manera permanente, lo que hace que las rebajas tradicionales ya no sean tan atractivas para los consumidores.
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Los cambios en los hábitos de consumo de los españoles, la concienciación medioambiental y la consolidación de los retailers low cost están provocando que las rebajas tradicionales pierdan atractivo. Es probable que esta tendencia continúe en los próximos años, ya que los consumidores cada vez son más conscientes de la importancia de comprar de forma responsable.
Según publicó Revista Inforetail
