Desde hace unos años, tecnologías como la Inteligencia Artificial, el Big Data, el Análisis de Datos o el propio Deep Learning se han convertido en sectores muy demandados y de gran importancia para las empresas. Al contrario que hace unos años donde eran una ciencia prácticamente sin explorar y que aún no gozaba de la importancia que tiene ahora.
El auge de la industria tecnológica ha supuesto una revolución en el ámbito empresarial ya que la correcta aplicación de todas estas profesiones puede acabar generando una serie de beneficios a la empresa: ya sea en términos económicos, de buscar nuevas vías de negocio o encontrar la forma de ahorrar tiempo en el trabajo.
Qué es el Deep Learning
El Deep Learning, o aprendizaje profundo, es un tipo de Machine Learning que tiene el objetivo de conseguir que un ordenador aprenda de forma autónoma y realice tareas de forma similar a los humanos como la identificación de imágenes, realización de predicciones o reconocimiento del habla entre otras funciones.
Esta técnica configura parámetros básicos acerca de los datos y entrena al ordenador para que reconozca patrones mediante capas de procesamiento. Es, por lo tanto, un sistema similar a la Inteligencia Artificial.
El Deep Learning funciona a través de un especialista en este sector que se encarga de entrenar al ordenador en cuestión para que el aprendizaje no sólo sea más rápido, sino que puede ser más preciso.
El proceso del entrenamiento es similar al aprendizaje de un niño. A través de un sistema de metaetiquetas crea un conjunto de características para identificar que una imagen corresponde, por ejemplo, a un libro y no a otro objeto. A partir de aquí construye un modelo predictivo para predecir que cualquier cosa que tenga las características de un libro como hojas o portada será identificado como libro. Estas características en cuestión se aplican en forma de patrones de píxeles y datos digitales.
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