Canasta básica urbana subió $5.50 entre febrero y marzo. El CDC considera que el GOES debe evaluar plan contra la inflación debido a población «está golpeada» en su economía
Los precios de los alimentos continúan subiendo pese a las medidas para hacer frente a la inflación mundial, implementadas por el Gobierno desde hace más de dos meses. Ante este panorama, el Centro para la Defensa del Consumidor (CDC) exhortó al Ejecutivo a evaluar las actuales estrategias y pensar en impulsar otras.
«Creo que la medida de congelar el precio de los combustibles es excelente y aplaudible, sin embargo, estamos notando que después de dos meses de haber sido implementadas los precios continúan incrementando», expuso Danilo Pérez, director ejecutivo de la organización.
Datos de la Dirección de Estadísticas y Censos (Digestyc) indican que durante marzo, el costo de la canasta básica alimentaria urbana alcanzó los $220.95, un 2.5 % más en comparación con febrero cuando promedió $215.45.
El último dato de la Digestyc reporta que el índice de precios al consumidor (IPC) llegó a 6.5 % en abril. La división de alimentos y bebidas no alcohólicas es la que más variación presentó con 10.89 puntos.
“La medida de congelar el precio de los combustibles es aplaudible; sin embargo, después de dos meses de haber sido implementada, los precios continúan incrementando”.
Danilo Pérez, Director ejecutivo del CDC.
Para Pérez, los consumidores están perdiendo rápido su poder adquisitivo, lo que ha provocado que, «quienes tenían tres platos de comida, ahora puedan comer solo dos, y los que tenían dos, a comer solo uno». Asimismo, aclaró que los altos precios no son especulativos, sino que se deben a los problemas en la cadena de suministros a nivel mundial. «Esto es lo que hay que mejorar, porque es un hecho que en la medida que se afecta el bolsillo de la población, la población lo que hace es dejar de alimentarse», expuso.
«La canasta básica aumentó, en poco más de un año, alrededor de $22 dólares afectando a la población cuyo salario no aumenta. La población ha perdido capacidad económica para adquirir sus alimentos», valoró.
En marzo, el parlamento salvadoreño aprobó la Ley Especial Transitoria para el Combate de la Inflación de Precios de Productos Básicos, que entre otras disposiciones incluye la eliminación de tributos a los combustibles y el cobro de un IVA diferenciado, la suspensión de ciertos aranceles, y «congelar» el precio de la energía eléctrica durante los próximos meses.
Recomendaciones
«Los factores que están determinando y afectando directamente el incremento en la cadena de suministros y altos precios del petróleo (…) Los datos no mienten, los datos los que nos dicen es que en el país los más afectados son la clase media vulnerable y los pobres que han caído a extrema pobreza», dijo Pérez en una entrevista de televisión.
Pérez recomendó al Gobierno promover la producción de alimentos en el país.
«Creo que el Gobierno tiene claro cuáles son los problemas del sistema alimentario, sin embargo existe un vacío a la hora de fortalecerlo, debido a las estrategias para apoyar a los productores a nivel nacional. Deben abrirse más mercados a nuestros productores para que la producción venga directamente al consumidor final», manifestó.
Para algunos analistas económicos, las medidas anticrisis que está ejecutando el Gobierno serán importantes para las finanzas públicas en la medida que se prorroguen por más de tres meses como se plantea.
Luis Membreño, presidente de Luis Membreño Consulting, estima que deberían de considerarse los «subsidios directos a las personas de más escasos recursos», debido a que el efecto de estas medidas podría ser limitado.
En su informe sobre el impacto de la guerra en Ucrania en los mercados de materias primas, el Banco Mundial (BM) también recomienda a los formuladores de políticas públicas mitigar mejor el impacto de los precios más altos en los hogares de bajos ingresos a través de medidas específicas, incluidas las transferencias de efectivo.
El multilateral señala que en respuesta al aumento de los precios, los formuladores de políticas a menudo han buscado brindar alivio a los consumidores a través de subsidios o impuestos más bajos; sin embargo, «estos son remedios generalmente ineficaces y pueden exacerbar la escasez de suministros», dice.
Cabe destacar que los precios de los alimentos en El Salvador así como en el resto del mundo han sido impactados por diferentes factores internacionales, como la pandemia, la crisis de contenedores y por último, la guerra entre Rusia y Ucrania.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que la guerra en Ucrania acelerará la inflación y se mantendrá elevada durante más tiempo de lo previsto debido a los costos más altos de las materias primas y las presiones de precios más amplias.
