El Gobierno planea la eliminación de la entidad encargada de divulgar los precios de la canasta básica, que de mayo a junio subió $10.38 en la zona rural y $8.08 en la urbana.
La Dirección General de Estadísticas y Censos (DIGESTYC) reportó que el precio que las canasta básica alimentaria (CBA) urbana llegó a $235.47 y la rural a $173.74, en junio, en el que podría ser uno de sus últimos reportes si el congreso salvadoreño aprueba disolverla, como lo solicitó el Ministerio de Economía esta semana.
En la zona urbana, la CBA registró una variación interanual del 16 %. En junio de 2021, su costo fue de $203.72, es decir, que en comparación a hace un año, los salvadoreños pagaron $31.75 más por sus alimentos. Solo de mayo a junio el alza fuede $8.08.
La población en la zona rural es la que más afectada ha sido por los incrementos en los precios de la comida. La DIGESTYC reportó que la variación interanual en la CBA fue del 19 %, es decir que pagaron $27.43 más en comparación con junio del año pasado. De mayo a junio, esta población tuvo que desembolsar $10.38 más por sus alimentos, según la DIGESTYC, encargada de la elaboración de estadísticas económicas.
En los últimos meses, la entidad ha reportado constantes incrementos en las canastas básicas alimentarias, debido a la crisis inflacionaria que enfrenta el país, al igual que el resto de naciones relacionada con la invasión rusa a Ucrania y los efectos económicos de la pandemia por covid-19, como la crisis en la cadena logística y altos precios de los fletes.
Otra de las tareas de la DIGESTYC es la elaboración del Índice de Precios al Consumidor (IPC), indicador que mide la inflación en el país, que en junio llegó a 7.8 % en El Salvador y que el Banco Central de Reserva (BCR) proyecta que comience a reducirse en el 2023 y se estabilice hasta el 2024.
De acuerdo con los registros del Banco Mundial (BM), el último año en que el país tuvo una tasa tan alta fue en 1996, con un 9.8 %; los siguientes años, para cerrar la década de los noventa, las tasas rondaron el 2.5 %.
La DIGESTYC indicó que a junio, la división de alimentos y bebidas no alcohólicas reportó el principal aumento del IPC punto a punto, alcanzando el 14.37 % en relación con junio de 2021.
Asimismo, explicó que el comportamiento del indicador respecto a mayo 2022, fue principalmente por las alzas de 1.68 % en alimentos y bebidas no alcohólicas, es decir el doble del aumento general del IPC que fue de 0.84 %.
Estos datos oficiales muestran que el efecto de las 11 medidas ejecutadas por el Gobierno desde marzo, para «combatir la inflación» no han tenido el efecto esperado en esta división.
El Ministerio de Economía afirmó que la petición de eliminar la DIGESTYC responde a que «las funciones de coordinación general de las estadísticas y censos del país que han estado a cargo de la DIGESTYC necesitan modernizarse conforme a la evolución y necesidades de la economía del país y a las nuevas tecnologías».
La cartera económica solicitó que se refuerce al Banco Central de Reserva para que retome sus funciones en un plazo de seis meses.
