El 90,6% de las empresas vio disminuido su nivel de ventas durante el vigente aislamiento social impuesto por el gobierno nacional para luchar contra la pandemia de COVID-19. Sólo un 9,4% mantuvo o incrementó sus ventas, destacándose, en este sentido, las del sector alimenticio.
Esta información surge de un relevamiento de la consultora BDO Argentina, acerca de las “Perspectivas macroeconómicas en el contexto de la crisis” por el coronavirus.
l universo de las empresas encuestadas estuvo integrado en un 54,7% por pymes, en tanto el 83% de ellas realiza el 70% de sus ventas en el mercado interno.
Universo de empresas
Entre las preguntas, una se relacionó con los obstáculos que plantea la cuarentena a las empresas. La continuidad operativa de la producción o los servicios ocupó el primer lugar, seguida muy de cerca por las dificultades en las cobranzas.
Dificultades que trae la cuarentena
En cuanto al impacto del aislamiento en el nivel de ventas, el dato es la disminución que reconoce el 90,6% de los encuestados. Obviamente, los principales afectados son aquellos que debieron cesar su actividad, por ser catalogadas como no esenciales. Por ejemplo, restaurantes y shoppings.
Hubo una pequeña porción del 3,8% que afirmó que sus ventas crecieron. “La caída del16,4% en la recaudación del IVA en marzo (medida en dólares y en comparación con igual mes del año anterior) se correlaciona con esta baja en la acividad”, señalan desde BDO.
Ventas en el aislamiento
La posibilidad de que el aislamiento se prorrogue más allá del 26 de abril preocupa, además, por los ingresos a los que pueden aspirar las empresas.
El 78,8% estima que si hay una prolongación, la situación de sus ingresos empeorará. Apenas el 21,1 cree que con una cuarentena extendida hasta fines de mayo, el nivel de actividad se mantendrá.
Ingresos con cuarentena extendida
Puesto el foco en la rentabilidad, la cuarentena produce un deterioro en el 92,5% de las empresas. El dato es que un 7,6% dice que pudo mantenerla.
BDO señala un indicador claro de este deterioro: “En marzo se observó una caída de la recaudación por el Impuesto a las Ganancias en dólares del 12,9%, en comparación con el mismo período de 2019”.
Nivel de rentabilidad
Indagados sobre el pago de los sueldos, el 41,5% dijo contar con fondos para pagar marzo y abril y el 75,5% cuenta con acceso a financiamiento (bancario, capital accionario, liquidación de stocks) para abonarlos.
Pago de sueldos
Si la decisión del gobierno nacional fuera ampliar el plazo del aislamiento, más de la mitad piensa que deberá tomar medidas con su personal (despidos, suspensiones, reducciones de salarios).
Políticas de personal
Respecto de los principales desafíos que plantea la coyuntura, el 69,8% de las empresas pone en primer lugar la recuperación de la demanda, en tanto un 22,6% ve como el mayor problema el acceso al financiamiento, “porque no hay mucha oferta y el costo es elevado”.
Los desafíos
¿Qué medidas ayudarían a las empresas a salir de la crisis? Ante la pregunta, BDO recogió un abanico que incluye beneficios impositivos (81,1%), tasas de financiamiento subsidiadas ( 58,5%), moratorias impositivas (50,95) y subsidios directos (45,3%)
Política macroeconómica
Por supuesto que es difícil planificar el futuro. Entonces, sólo el 5,7% mantiene sin cambios los planes de inversión, contrastando claramente con el 81,1% los reduce o cancela.
Planes
Tomar nota
En el capítulo de conclusiones, desde BDO subrayan: “La particularidad de la crisis actual consiste en el shock gemelo a la oferta y la demanda en forma simultánea. Esto limita la efectividad de las políticas expansivas monetarias y fiscales, debido a que en el caso de la oferta, el shock se relaciona fundamentalmente con la capacidad de las personas de asistir a sus puestos de trabajo. El shock de oferta, al impactar negativamente sobre el nivel de empleo, refuerza el shock negativo sobre la demanda”.
“En este contexto, consideramos que en estos momentos de crisis es estratégico contar con herramientas para el manejo del capital de trabajo, vital para la continuidad de la cadena de pagos y del ciclo operativo de la actividad. Una vez superado el momento de crisis, para adaptarse a la nueva realidad las empresas deberán revisar y ajustar sus planes de negocio”, advierten.
¿Qué puede pasar? “A nivel macro es difícil predecir el nivel en el que se encontrarán variables clave como inflación y tipo de cambio para el segundo semestre, así como también cómo será la recuperación del nivel de actividad, factores que estarán determinados por la duración del período de cuarentena, la recuperación de los principales socios de Argentina y la resolución del frente de la deuda externa bajo ley extranjera”, analizan desde BDO.
