Las diferencias culturales europeas en la experiencia del cliente

experiencia del cliente

Las diferencias culturales en Europa juegan un papel crucial en la experiencia del cliente. Cada país tiene su propio conjunto de normas, valores y expectativas, lo que plantea desafíos y oportunidades para las empresas. En este artículo exploraremos cómo estas diferencias impactan la madurez de la experiencia del cliente y cómo las empresas pueden adaptarse a ellas.

Los modelos de madurez de CX en Europa varían de un país a otro. Algunos apenas han comenzado o todavía están en las primeras etapas de desarrollo, mientras que otros están más avanzados en la adopción, implementación y optimización de estrategias centradas en el cliente.


Banner_frasco-suscripcion-800x250

Esta nota apareció primero en Customer Think

Las razones por las que algunos países avanzan a diferentes ritmos son tan diversas como el continente mismo. Europa es una mezcla multicultural y diversa de naciones y personas. Cada país tiene su propia cultura, tradiciones y normas distintas, lo que puede dificultar el establecimiento de una mentalidad unificada de experiencia del cliente.

Los factores sociales y económicos también influyen en la forma en que los países abordan la experiencia del cliente. Las diferencias en la comprensión de CX, las capacidades, el estilo y los enfoques también tienen un impacto.

Estos son todos desafíos. Sin embargo, también existe una oportunidad para que las empresas desarrollen experiencias personalizadas que resuenen con los clientes nacionales e internacionales. Experiencias basadas en un gran diseño y conexiones emocionales que impulsan la adopción, la lealtad y la defensa de la marca. Pero primero, debemos explorar en detalle la magnitud de los desafíos.

¿Cómo se compara la madurez de CX?

Una investigación realizada en 2021 sobre la madurez de medianas y grandes empresas en Europa por Zendesk cuenta una historia reveladora. Algunos países corren el riesgo de quedarse rezagados respecto a otros países europeos y al resto del mundo (más sobre esto más adelante).

Lee más: Cómo Transformar la Experiencia de Cliente con Empatía Compasiva

Casi dos tercios (64%) de los encuestados en Francia y España aceleraron las iniciativas de CX en el último año. La cifra fue del 48% en Alemania, el 44% en los Países Bajos y el 49% en el Reino Unido.

Entonces, detengámonos por un momento y pensemos en los factores que, en mayor o menor medida, pueden afectar el nivel de madurez de la experiencia del cliente en un país.

La división en CX: ¿qué diferencia a los países?

Modelos y cultura empresarial: las prácticas empresariales y los enfoques hacia la experiencia del cliente pueden variar entre países. Por ejemplo, algunos pueden priorizar la satisfacción del cliente como un objetivo empresarial clave, mientras que otros pueden centrarse más en el precio o el producto. La reducción de costos y la eficiencia operativa también son impulsores.

Comprensión de CX: en algunos países, las organizaciones pueden no considerar que ofrecer una gran experiencia del cliente sea una parte fundamental de su propuesta. O bien, entienden el valor de CX pero no están seguros de cómo desarrollar una estrategia al respecto.

Brechas de empatía: la empatía puede valorarse de manera diferente en diferentes países.

Estilo de comunicación: los países pueden tener estilos y preferencias de comunicación diferentes. La comunicación directa es común en Alemania y Suiza, mientras que hay un estilo de comunicación más indirecto en Francia, España e Italia.

Velocidad de servicio: algunos países pueden valorar la eficiencia y esperar un servicio rápido, mientras que otros pueden priorizar un enfoque más relajado.

Datos y personalización: existen diferentes niveles de madurez en cuanto a datos en toda Europa. Las empresas más exitosas tienden a tomar decisiones basadas en datos sobre cómo satisfacer las necesidades de sus clientes de manera personalizada. Algunas empresas y países también pueden dar más valor al servicio y la atención personalizada.

Métodos de pago: diferentes países pueden tener métodos de pago preferidos diferentes, como efectivo versus tarjeta de crédito. Por supuesto, en el ámbito B2B, se prefiere el pago digital con IBAN y transferencias bancarias. Es evidente que la pandemia ayudó a acelerar el cambio hacia los pagos digitales en toda Europa.

Normas culturales: las normas y valores culturales pueden influir en las expectativas y el comportamiento de los clientes, como la importancia de la puntualidad en Suiza o el énfasis en la hospitalidad en Italia.

Prácticas regulatorias: en general, en países con sólidas leyes y regulaciones de protección al consumidor, las empresas pueden estar más incentivadas a invertir en la experiencia del cliente para evitar repercusiones legales y mantener su reputación.

Condiciones económicas: en países con economías más desarrolladas, las organizaciones suelen tener más recursos para invertir en iniciativas de experiencia del cliente. Mientras tanto, en economías menos desarrolladas, las empresas tienden a centrarse más en las necesidades básicas de servicio al cliente. Esto, junto con los factores culturales, también puede afectar la innovación y la creatividad.

Tomemos cuatro países como ejemplo…

Alemania (donde resido) es un buen punto de partida. Aquí hay algunos factores que investigué y que pueden explicar por qué la CX alemana es considerada inmadura. Comencemos con la cultura empresarial.

En cuanto a la experiencia del cliente, la cultura empresarial alemana se caracteriza a menudo por hacer hincapié en la eficiencia, la precisión y la practicidad. Históricamente, este enfoque ha priorizado la entrega eficiente de productos o servicios en lugar de crear una conexión personalizada y emocional con el cliente.

La experiencia del cliente aún está en sus primeras etapas, pero mejora rápidamente gracias a iniciativas de grandes empresas como Software AG, SAP, BMW y algunas otras. Alemania y toda la región de DACH también cuentan con una comunidad vibrante y en evolución de profesionales de CX y organizaciones globales que están comenzando a diseñar experiencias del cliente más maduras.

A pesar de esto, las opiniones sobre la madurez de CX varían. Es difícil lograr un consenso en un país que valora la construcción de consensos y se autodenomina «inclusivo y diverso».

¿Cuáles son los grandes desafíos?

Burocracia: Alemania tiene fama de ser extremadamente burocrática. Esto puede dificultar que las empresas sean ágiles y receptivas a las necesidades de los clientes, o que las cosas sean sencillas, tanto en B2B como en B2C. Esto puede llevar a una toma de decisiones más lenta y dificultades para implementar iniciativas centradas en el cliente. Hacer las cosas demasiado complicadas acaba con las ideas. Se necesita simplicidad en CX.

Barreras del idioma: aunque muchos alemanes hablan inglés, las barreras del idioma aún dificultan la comunicación efectiva de las empresas con los clientes.

Competencia: Alemania es un mercado altamente competitivo y las empresas pueden estar más enfocadas en la competencia de precios/servicios premium que en invertir en CX. También se habla mucho sobre resultados imprácticos en el mercado. A medida que la comprensión de CX en Alemania madura, están surgiendo cada vez más oportunidades, lo que hace importante reconocerlas.

Entorno regulatorio: las estrictas regulaciones de privacidad de datos pueden dificultar que las empresas recopilen y utilicen datos de los clientes para tomar decisiones y personalizar experiencias.

Francia: por qué el mercado francés puede no ser tan maduro en CX.

¿Cuáles son los grandes desafíos?

Factores culturales: en general, la cultura francesa valora más la tradición y las relaciones personales que la eficiencia y la comodidad, lo que puede afectar las prioridades de CX.

Entorno regulatorio: el país también tiene regulaciones estrictas en materia de privacidad de datos.

Barreras del idioma: el francés es el idioma principal en Francia, lo que puede suponer un desafío para las empresas internacionales que buscan expandirse, pero no para las grandes organizaciones globales que se han adaptado. 😊

Mercado fragmentado: el mercado es altamente competitivo y fragmentado, con un gran número de pequeñas y medianas empresas. Esto dificulta establecer estándares uniformes de experiencia del cliente y las mejores prácticas en todas las industrias.

Falta de inversión: algunos expertos creen que las empresas francesas han sido más lentas en invertir en experiencia del cliente, tecnología y capacitación, lo que puede llevar a una falta de innovación y progreso en esta área.

Reino Unido: la madurez de CX es debatible cuando las soluciones y las mejores prácticas a menudo se adoptan directamente de los Estados Unidos. Esto crea menos espacio para intentar crear su propio estilo. Sin embargo, también hay otros factores específicos que podrían contribuir a una menor madurez.

¿Cuáles son los grandes desafíos?

Enfoque en el precio: algunas empresas y clientes tradicionalmente han valorado el precio sobre la experiencia y la calidad. Nuevamente, esto puede llevar a que las empresas prioricen medidas de reducción de costos sobre las inversiones en CX. Pero esto está cambiando y los presupuestos están aumentando, al igual que el enfoque en CX.

Mercados saturados: la competencia es intensa, con muchos actores luchando por obtener cuota de mercado. Esto puede llevar a un enfoque en ganancias a corto plazo en lugar de inversiones en CX a largo plazo. Esto también está cambiando y las mentalidades están evolucionando.

Industrias heredadas: el Reino Unido tiene una proporción significativa de industrias arraigadas en el pasado. Esto incluye la fabricación y los servicios financieros. Estas industrias tienen desafíos únicos para responder de manera ágil a las cambiantes necesidades y expectativas de los clientes. Esto se aplica a las industrias tradicionales tanto en suelo europeo como en todo el mundo.

Falta de regulación: en comparación con otros países, el Reino Unido tiene regulaciones relativamente más laxas en relación con sus clientes.

Ahora, un contraste muy interesante con Europa:

Emiratos Árabes Unidos: mencioné anteriormente que algunos países corren el riesgo de quedarse rezagados en CX en comparación con otros países europeos y el resto del mundo. Los Emiratos Árabes Unidos (EAU) son un ejemplo destacado de cómo un país puede estar liderando el camino en términos de madurez de CX.

Los EAU están adoptando rápidamente tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, el aprendizaje automático y la automatización para mejorar la experiencia del cliente. Las empresas están invirtiendo fuertemente en la digitalización de los procesos de CX y están adoptando estrategias centradas en el cliente como una prioridad estratégica. También están utilizando activamente las redes sociales y las plataformas de mensajería para interactuar con los clientes de manera más efectiva.

Algunos factores que podrían contribuir a la madurez de CX en los EAU incluyen:

Enfoque en la innovación: los EAU tienen una mentalidad empresarial muy centrada en la innovación y la adopción de nuevas tecnologías. Las empresas están dispuestas a probar soluciones innovadoras y disruptivas para mejorar la experiencia del cliente.

Demografía diversa: los EAU son un país multicultural con una gran población expatriada. Esto crea una demanda de servicios y experiencias adaptados a diversas culturas y necesidades.

Visión del liderazgo: el liderazgo en los EAU ha reconocido la importancia de la experiencia del cliente y ha establecido iniciativas y regulaciones para impulsar la adopción y la madurez de CX en el país.

Turismo y hospitalidad: los EAU son un destino turístico importante y el sector de la hospitalidad es una parte integral de su economía. Las empresas en esta industria han priorizado durante mucho tiempo la experiencia del cliente y están a la vanguardia de las mejores prácticas.

En resumen, la madurez de la experiencia del cliente en Europa varía de un país a otro. Factores culturales, empresariales, regulatorios, económicos y sociales influyen en la forma en que los países abordan la experiencia del cliente. Algunos países están más avanzados en términos de adopción y optimización de estrategias centradas en el cliente, mientras que otros aún están en las etapas iniciales de desarrollo. Sin embargo, es importante destacar que muchos países europeos están aumentando su enfoque en la experiencia del cliente y buscando mejorarla para satisfacer las cambiantes expectativas de los clientes.

Banner_azules
Reciba las últimas noticias de la industria en su casilla:

Suscribirse ✉