Estudios: Los huevos de pascua alientan el consumo en supermercados

De los chocolates especiales de Pascua de Mercadona a los dulces de las Clarisas de Carrefour. Los lineales están listos para celebrar una Semana Sant atípica en la que las restricciones marcarán el aumento del consumo en el hogar. Los retailers apuestan por la tradición y los productos de indulgencia.

Las principales cadenas de supermercados refuerzan estos días sus lineales para ofrecer al consumidor los productos típicos de una Semana Santa nada convencional por la situación derivada de la pandemia de coronavirus.


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Las restricciones impuestas por el Gobierno y algunas Comunidades Autónomas, tanto de movilidad como a la hostelería y la restauración, obligan al consumidor a replantearse sus vacaciones de Semana Santa. El consumo no va a ser igual y donde antes había dispersión y comidas en el restaurante, ahora habrá consumo en casa y un ‘cocooning’ más obligado que voluntario.

Los datos del barómetro ‘Consumo y compra dentro y fuera del hogar después del Covid-19’, de Aecoc Shopperview señalan que el 66% de los consumidores reconoce que sale de casa lo menos posible y que ha dejado de hacer muchas cosas de las que hacía habitualmente, además el 61% afirma que se quedará en casa en Semana Santa. Es por ello, que el tiempo en casa se ha convertido en el más valioso y debe ser de calidad. De ahí la apuesta de los retailers por una mezcla entre lo tradicional y el consumo de indulgencia.

MERCADONA Y SU APUESTA POR EL CHOCOLATE

La cadena de supermercados Mercadona ha anunciado el lanzamiento de su nuevo surtido de chocolates de Pascua «para que ‘el Jefe’ (cliente en el argot de la cadena valenciana) pueda celebrar estas fiestas del modo más dulce».

De este modo, los tradicionales huevos llegan a los lineales en bolsa y en huevera, además de rellenos de disquitos. Se encuentran en tamaño mini o grande y también tematizado con La Liga de la Justicia y Bebés Llorones (los niños están de vacaciones y son protagonistas del consumo durante estos días). Tampoco faltan las figuras con forma de conejo, polluelo o balón de fútbol, junto a las piruletas o una caja especial de bombones.

Esta gama de productos es elaborada por proveedores especialistas como Vira Brands (Martorell, Barcelona), Cantalou (Pallejà, Barcelona), Kims Chocolates NV (Bélgica), Confiserie Vandenbulcke (Bélgica) y Mon Desir (Italia).

LIDL REFUERZA SUS MARCAS FAVORINA Y DELUXE

Pata estos días de Semana Santa, Lidl vuelve a lanzar dos de sus marcas más emblemáticas, Favorina y Deluxe, con productos especiales para disfrutar de esta Pascua. Con más de 160 referencias este surtido de temporada estará compuesto de artículos tan apetecibles como: pastas tipo Fusilloni, Panzerotti con gamba y cangrejo, Tagliolini con trufa, Risotto de arroz carnaroli, hojaldre de salmón y los postres más suculentos Crème Brülée, Mini Bavaoris, además de los tradicionales dulces de Semana Santa como el conejo de Pascua y huevos de chocolate.

CARREFOUR Y LOS DULCES DE LAS CLARISAS

La cadena de supermercados Carrefour ha incorporado a su surtido de Semana Santa los dulces elaborados en once conventos de nueve provincias españolas, entre los que encuentran las Clarisas de Morón de la Frontera, en Sevilla. De este modo, la compañía pone a disposición de sus clientes, hasta el 4 de abril, pestiños, nevaditos, rosquillas, magdalenas, tejas o bizcochos elaborados a la manera tradicional de Morón.

Entre las entidades que se han sumado a esta iniciativa se encuentran, además de las Clarisas de Morón, las Clarisas de Astudillo y las Hermanas Brígidas de Paredes de Nava, ambas en Palencia; las Clarisas de Cantalapiedra en Salamanca; las Clarisas de Segovia; el Monasterio de Santa Cruz de Casarrubios del Monte, en Toledo; las Clarisas de Siruela y las de Llerena, en Badajoz; las Clarisas de Villarrubia de los Ojos, en Ciudad Real; las Agustinas de San Mateo, en Castellón y las Carmelitas de Toro, en Zamora.

La cadena ya colabora con otros conventos, como el de Santa Inés en Sevilla, del que comercializa sus típicos dulces en los hipermercados de esta provincia desde el verano pasado.

LA TRADICIONAL MONA DE PASCUA DE CAPRABO

En Cataluña no puede faltar la tradicional Mona de Pascua y en Caprabo refuerzan especialmente su surtido de este producto y de sus figuras de chocolate.

Caprabo prevé que estos productos típicos de Semana Santa registren un aumento de ventas del 20%.

En 2020, señala la compañía, la venta de estos productos estuvo muy impactada por el inicio de la pandemia de la Covid-19 y las limitaciones de movilidad vigentes en ese momento. Este hecho provocó que las familias optaran por elaborar sus propias monas en sus hogares. Ahora Caprabo quiere que las familias acudan a sus supermercados a hacerse con ellos.

Caprabo apuesta por este producto tradicional de proximidad elaborado en la comarca de la Noguera, provincia de Lleida, de manera artesanal con materias primas de la zona, con sabores tradicionales de frutas escarchadas y mantequilla natural. Este año, como novedad, los supermercados de Caprabo también apuestan por una versión en chocolate.

TRASVASE DE CONSUMO AL HOGAR: MÁS DELIVERY Y MENOS VISITAS AL RESTAURANTE

La crisis de la Covid-19 también ha ocasionado un trasvase del consumo de fuera a dentro del hogar que se mantendrá en Semana Santa, con excepciones en aquellas escasas Comunidades Autónomas, como Madrid, que intentan que la hostelería se mantenga en pie. La imposibilidad de acudir a bares y restaurantes y el incremento del teletrabajo explican que el 40% de los consumidores busque productos para cocinar en casa, mientras que el 31,5% compra ingredientes para replicar las comidas que antes hacía en locales de restauración, según los datos de Aecoc.

En paralelo, se consolida el delivery: el 47,5% de los consumidores ha pedido comida a domicilio en las últimas semanas y el 31% afirma que ahora gasta más en este servicio que antes de la crisis. Entre los usuarios del delivery, el 54% afirma que hace pedidos un mínimo de una vez a la semana.

En cambio, la pandemia sigue condicionando la actividad de la hostelería. Tan solo uno de cada cuatro consumidores acude a bares y restaurantes cuando las restricciones lo permiten y únicamente el 14% gasta igual o más que antes de la pandemia en sus establecimientos.

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