Estudios: Los hábitos de consumo de los españoles durante el COVID-19

Las restricciones de capacidad y horario de apertura de los restaurantes, así como los cierres y toques de queda, han impactado en el comportamiento de los consumidores en España.

Los españoles han tenido que adaptarse a la evolución de la pandemia y a las intervenciones gubernamentales. Los cambios clave en el comportamiento del consumidor debido a COVID-19 han sido:

  • Los españoles consumen alimentos y bebidas en el mismo número de ocasiones, pero en diferentes lugares y de diferentes formas, creando nuevas oportunidades.
  • El consumo por placer aumentó en 2020, con 2.445 millones más de ocasiones de consumo en el hogar que en 2019.
  • Los productos de indulgencia parecen ser un generador de valor, ya que las personas están dispuestas a pagar un 15% más.

Desde 2018, en promedio, más del 16% de las ocasiones de consumo de cada trimestre tuvo lugar fuera del hogar en España. Sin embargo, esa tendencia cayó al 4,2% en el segundo trimestre de 2020, coincidiendo con los meses más estrictos de encierro, y al 12,7% y 10% en el tercer y cuarto trimestres de 2020.


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Antes de la pandemia, los españoles consumían fuera del hogar una media de 5,4 veces por semana; en el último período analizado de 2020, se redujo a tres veces por semana. De todas las ocasiones, es el desayuno lo que la gente prefiere tomar al aire libre, y los consumidores dejan bocadillos entre comidas, por ejemplo, la merienda, para el hogar.

Por su parte, la tendencia del consumo de alcohol sufrió un cambio en 2020. Una de cada tres ocasiones fuera del hogar fue a la hora del aperitivo, es decir, antes de las comidas. Es evidente que esto está directamente relacionado con las restricciones en los horarios de apertura debido a la pandemia. De hecho, si analizamos los datos de Madrid y Barcelona, ​​ciudades que han tenido distintos grados de restricción, se observan distintas tendencias. En este sentido, el consumo en Barcelona se ha desplazado hacia las comidas y las mañanas, mientras que los hábitos se han mantenido igual en Madrid.

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Es importante señalar que, a pesar de que las tendencias cambian y los consumidores optan por diferentes formas de comer (fuera del hogar, en el hogar o a domicilio), el número de ocasiones de consumo de alimentos y bebidas por persona por semana se ha mantenido estable en alrededor de 28 años. los últimos tres años. Entonces se puede decir que el número de ocasiones de consumo sigue siendo el mismo, solo han cambiado los lugares de consumo.

En cuanto a las horas de comida, los cambios en los patrones de empleo, incluido el desempleo y el teletrabajo, han hecho que el desayuno se coma más adelante en 2020, pero esto no afectó a las otras horas de comida del almuerzo, la merienda y la cena. Sin embargo, el tiempo que dedicamos a cocinar en comparación con 2018 ha aumentado un 2,3% para los almuerzos de lunes a viernes y un 1,8% para los almuerzos de fin de semana. El tiempo dedicado a la preparación de cenas también ha aumentado, aunque en menor medida, un 1% los días laborables y un 1,3% los fines de semana.

El impacto de la pandemia en las preferencias nutricionales

La pandemia también ha provocado cambios en las preferencias y prioridades alimentarias. En 2020, el 56,1% de los encuestados por Kantar afirmaron estar ‘preocupados por la composición nutricional de lo que comían’, lo que representa un 2,3% menos que en 2019. Además, el 10,8% dijo que prefiere pedir comida en casa en lugar de salir a comer. comer, que es un 2,6% más que en 2019, lo que supone un incremento significativo en la entrega a domicilio.

Otro cambio en las tendencias ha sido la caída en la popularidad de la dieta flexitariana, que había estado en auge en los últimos años. El 20,6% de los encuestados dice que ‘intentan reducir el consumo de carne y pescado’, que es un 1,4% menos que en 2019.

Al mismo tiempo, ha habido un aumento en el número de personas que hacen ejercicio tres o más veces a la semana: 28,7% en 2020 en comparación con 27,1% en 2019.

A lo largo de la pandemia, los españoles han ido disfrutando más de su comida y bebida, siendo el ‘placer’ el motivo que más ha aumentado desde 2019, en comparación con los demás: salud, hábito y practicidad. En 2020, los compradores consumieron comida y bebida 2.445 millones de veces más por ‘placer’ que en 2019, y la mayoría de estas ocasiones fueron captadas por el canal dinámico (80%) en comparación con el canal especializado (10%) e Internet (13%). . Este hecho ha favorecido a cadenas como Alcampo, Eroski y Lidl, que son las que mejor se adaptan a este tipo de ocasiones.

El aumento del consumo ‘indulgente’ o del consumo por placer también ha llevado a los clientes a pagar una media de un 15% más por productos que satisfacen esta necesidad.

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