De todos modos, las negociaciones del convenio del comercio textil son de ámbito provincial, aunque en los últimos meses Acotex ha mantenido conversaciones informales con los sindicatos en los que ha aflorado la posibilidad de negociar, si no un convenio nacional, al menos sí unas bases comunes de aplicación en todas las provincias.
Acotex es la responsable de las negociaciones en Madrid, y también ha defendido los intereses de sus asociados (entre los que se encuentran pymes y grandes empresas como Tendam, además de la propia Inditex) en otras provincias, donde quien suele sentarse a la mesa es un operador del comercio local, a menudo con escasa representatividad.
Es el caso de Córdoba, Sevilla o Girona, donde Acotex impugnó el convenio (que establecía diferencias salariales según el tamaño de la empresa) al considerar que perjudicaba a los pequeños comercios.
La posibilidad de negociar un convenio nacional ha estado en los últimos meses sobre la mesa
Ese es uno de los puntos más frecuentes de discordia entre la patronal presidida por Eduardo Zamácola y los grandes retailers como Inditex, que a menudo opta por priorizar la paz social y no negociar los convenios a la baja.
En cualquier caso, los convenios, ya sean provinciales, autonómicos o un futuro convenio estatal, son ahora más importantes que nunca, ya que la nueva reforma laboral prioriza el convenio colectivo sectorial al convenio de empresa en aspectos como los salarios o la regulación de los contratos fijos discontinuos a tiempo parcial, muy importantes en el comercio.
De esta forma, compañías como Primark, que cuentan con su propio convenio, tienen de pronto un interés estratégico en los convenios que se pacten en las provincias donde opera.
“Nosotros defendemos tanto al grande como al pequeño como al mediano”, subraya Eduardo Zamácola, presidente de Acotex. “Nos da pena que no vayamos todos unidos en la defensa de nuestros intereses, y entendemos que debe haber algún tipo de interés que choca con otros asociados que tenemos”, resume Zamácola, que aun así tiende la mano a la nueva asociación: “máximo entendimiento y cooperación en lo que haga falta”.
El movimiento se produce en un momento en que los convenios han cobrado particular relevancia tras la reforma laboral
Por el momento, todos los miembros de la asociación rechazan hacer declaraciones, a la espera de que se constituya la junta directiva y defina quién será el portavoz. Una de las grandes incógnitas es precisamente quién asumirá esa función ya que Inditex, que lidera el proyecto, ha preferido siempre mantener un perfil bajo y nunca ha tenido un papel protagonista en el entorno asociativo.
La constitución de esta nueva entidad se produce meses después de que la propia Inditex liderara la constitución del Observatorio de la Moda, una entidad nacida inicialmente para impulsar un Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (Perte) para la moda en España que, finalmente, se ha descartado.
En esta entidad, Inditex y otros grandes operadores del sector, como Mango y Tendam, comparten mesa con las principales patronales del sector textil y de la confección, como Moda España y Texfor.
La proactividad asociativa de Inditex, que siempre había mantenido un perfil bajo en este ámbito, al menos en España, se produce tras el histórico cambio en la presidencia del grupo español, tras la salida de Pablo Isla y la llegada de Marta Ortega en la presidencia, con Óscar García Maceiras como consejero delegado.