Las lecciones de resiliencia que Rafa Nadal puede enseñarle al mundo de los negocios. El mallorquín es el jugador que nunca lo da por perdido. Su tenacidad cambió la forma de jugar al tenis y por eso sus partidos son una lección de resiliencia y proactividad más allá de lo deportivo.
Un presente complicado
Acaba de conocerse el resultado del sorteo del Abierto de Australia y determinó que Nadal deberá defender el título contra el británico Jack Draper. Es decir, le tocará una llave difícil. Lo bueno es que evitaría un enfrentamiento con Djokovic hasta una hipotética final.
Como Nadal empezó el año con una derrota ante Cameron Norrie en la United Cup 2023, se pueden ver pronósticos poco alentadores para el mallorquín en este abierto, sin embargo Nadal está acostumbrado a sorprender y dar vuelta los resultados. Por eso, a pesar de haber tenido un mal comienzo de año, sigue siendo uno de los favoritos.
Rafa Nadal
Una mentalidad privilegiada
La forma de juego de Rafa Nadal cambió al tenis. El español sigue la pelea hasta en los peores momentos y no da por perdida ninguna pelota. Su capacidad de darle continuidad al partido a pesar de todo y su gran resiliencia lograron que pase a la historia.
Rafa Nadal empieza el año como número 2 del mundo. En declaraciones a la prensa en México se declaró dispuesto a batallar “hasta que el cuerpo o la mente digan basta”. Dio a entender así que no está en sus planes retirarse pronto, siempre que las lesiones lo permitan.
Rafa Nadal cumplirá 37 años a mitad de este 2023. La edad no le impide perseguir la meta de seguir ganando Grand Slams y vencer a los únicos dos tenistas que están realmente a su altura: Novak Djokovic y Roger Federer (ya retirado).
El rey indiscutido de Roland Garros
La fuerza mental de Rafa Nadal lo llevó a ganar este torneo catorce veces. Desde que lo ganó a los 19 años en 2005, sólo dos tenistas han sido capaces de triunfar en París: Soderling y Djokovic. El serbio logró vencerlo dos veces, en cuartos de final en 2015 y en el 2021.
El año pasado Nadal llegó lesionado a París. Nadie pensaba que pudiera llegar lejos porque la lesión le impedía caminar por momentos. Sin embargo, logró sobreponerse a las circunstancias y nuevamente salió adelante. Le ganó a Novak Djokovic en los cuartos de final. En las semifinales Zverev se retiró en el tie-break del segundo set. En la final, Nadal jugó duro contra Casper Ruud y se hizo con la copa parisina otra vez.
