Crisis de la natalidad española causa oleada de quiebras en la moda infantil

  • Entre enero y abril han nacido solo 103.443 personas

Según publica eleconomista.es En España no están naciendo niños. Así lo evidencia el último informe del Instituto Nacional de Estadística (INE) con datos de todo el país durante el primer cuatrimestre de 2023.De esta forma, en total, solo han nacido entre enero y abril de 2023 unas 103.443 personas, lo que supone un 1,75% menos respecto al mismo período del año anterior. Una radiografía que afecta, entre otros, al sector de la moda infantil.

En el último siglo, el sector de la industria textil ha sido de los más afectados, pero, sobre todo, el enfocado a la moda infantil. En 2018, este sector tenía atisbos de repunte, sin embargo, la crisis sanitaria y el obligado cierre del comercio, retomó el oscuro panorama que luego se hizo mayor con la guerra de Ucrania, la escasez de suministros y la inflación.


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El protagonista ahora, que ha impulsado a la oleada de quiebras, responde a la baja tasa de natalidad en nuestro país. Quizás para el sector no es nada nuevo. Este fenómeno lo ha tenido que enfrentar desde 2008, cuando nacieron 519.000 niños y que ha ido a la baja.

Entre las empresas del sector de moda infantil que se han despedido del mercado están Bonnet á Pompon, tras acumular 8 millones de euros en pérdidas; Kidiliz, la marca entró en suspensión de pagos en 2021; También ha sido el caso de Sergen Major, a concurso de acreedores en febrero de 2022.

Firmas españolas como Pili Carrera o Normandie también se han despedido del mercado. En 2020 Trasluz también echó el cierre y Tuc Tuc fue comprada por Nath para evitar este mismo destino. A nivel internacional destaca el caso de Gymboree que ha acabado en quiebra tras alcanzar una deuda de 800 millones de dólares.

Factores de la crisis

Desde la Asociación Española de Productos para la Infancia (Asepri) justifican que las quiebras en la que se ha visto atrapado el sector responde a una «importante atomización del sector». En el que lo normal, son medianas o pequeñas empresas que no han tenido músculo financiero para aguantar el revés de estos dos años tan complicados. «Lleva años habiendo un exceso de oferta, muchas empresas con una competencia muy exagerada» defiende la asociación.

Otro de los factores que han generado la crisis en esta industria, responde a la «internacionalización». Según datos del ICEX, el sector, que factura en total 1.200 millones de euros, recibe el 54% de sus ventas de exportaciones a otros países. «La crisis de 2008 fue el detonante que provocó que un buen número de pymes extendieran sus miras más allá de nuestras fronteras» afirma el ICEX. «La madurez de la población europea ha provocado que estas compañías busquen nuevos mercados en los países emergentes».

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