La protesta social en Ecuador cumplió este miércoles su décima jornada consecutiva con masivas movilizaciones en Quito, algunas pacíficas y otras fuertemente reprimidas por la Policía, mientras parece postergarse la posibilidad de diálogo entre el presidente Guillermo Lasso y el líder indígena Leonidas Iza.
Aunque se tenía prevista la irrupción en escena de los sindicatos, han sido las organizaciones campesinas y estudiantiles las que han figurado, así como la Policía y los soldados que mantienen el control en algunas zonas del centro de Quito asediadas por los manifestantes.
Una multitudinaria y pacífica marcha campesina, que transcurrió por las calles del centro de la capital, logró llegar hasta la plaza de Santo Domingo, que se vio desbordada por la movilización con la que el movimiento indígena mostró músculo.
Las fuerzas del orden no actuaron y prudentemente solo acompañaron a los manifestantes que hicieron escuchar el eco de sus demandas muy cerca de la Plaza de la Independencia, donde se ubica el Palacio presidencial, fuertemente custodiado por policías, militares y gigantescas vallas de seguridad.
EL TROFEO DE EL ARBOLITO
La de los sindicatos fue una marcha menor, pues el grueso de ese colectivo ha decidido apoyar las movilizaciones de los campesinos y a los estudiantes que se enfrentan casi todo el día a las fuerzas del orden en torno al parque de El Arbolito, un trofeo que ahora atesoran policías y soldados, pese a que ha sido tradicionalmente un enclave de los manifestantes.