Aunque la variación anual del índice de precios al consumidor (IPC) en Colombia en 2021, 5,62 por ciento, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (Dane), fue la más alta de los últimos cinco años en el país, esta no no se ubica ente las más elevadas del mundo.
Según registros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde), Turquía, con una inflación del 36,1 por ciento el año pasado, es una de las naciones con mayor variación del IPC del mundo, de los que ya se conoce este dato.
Otros países con inflaciones más altas que la de Colombia son España, que cerró el año pasado con un IPC de 6,7 por ciento; Perú, con 6,4 por ciento y Bélgica, con 5,7 por ciento, según la Ocde.
Sin embargo, con datos al corte de noviembre del año pasado, es muy probable que los anteriores no sean los únicos países que hayan terminado el 2021 con un costo de vida desbordado para sus habitantes, debido, entre otros factores, a la crisis logística mundial, que encareció los bienes importados y también al disparo en el precio del dólar.
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Naciones como Argentina, Brasil y Rusia, que no pertenecen a la Ocde, registraron hasta noviembre del año pasado, variaciones en el IPC del 51,2; 10,7 y 8,4 por ciento anual, en su orden.
La inflación en los primeros 11 meses del 2021 en Colombia fue de 5,3 por ciento, según registros del Dane.
De ese grupo también hacen parte Lituania, que al cierre de noviembre pasado registró una inflación anual del 9,2 por ciento: también Estonia, cuyo registro fue de 8,8 por ciento; Estados Unidos que reportó un 6,8 por ciento; Hungría y México, ambos con una variación similar del IPC del 7,4 por ciento; Chile, con 6,7 por ciento y la República de Eslovaquia que terminó ese mismo mes con una inflación del 5,6 por ciento, según registros de la Ocde.
Los más afectados en Colombia
Los más impactados en Colombia con la variación en el índice de precios al consumidor (IPC) observado el año pasado fue la población pobre y la más vulnerable, pues para esos dos segmentos la inflación estuvo muy por encima del promedio para toda la población del país.
La razón es que para los pobres y los más vulnerables en Colombia la inflación se situó en 6,85 por ciento anual el año pasado, esto es, 1,23 puntos porcentuales por encima del registro total revelado ayer por el Dane de 5,62 por ciento.
Significa esto que en términos reales, el aumento del salario mínimo para las familias pobres y vulnerables del país solo será del 3,22 por ciento real, si se tiene en cuenta que dicho incremento salarial fue de 10,07 por ciento.
Acciones para contener la inflación
Tan pronto el costo de vida en Colombia comenzó su escalada, la autoridad monetaria hizo un viraje en su política, con miras a enfriar la economía y frenar el mayor gasto de los hogares. Así las cosas, empezó su ajuste gradual en el costo del dinero, elevando la tasa del mercado que hoy se encuentra en 3 por ciento, desde el 1,75 por ciento, nivel al que llegó debido a la pandemia.
En reciente oportuniad, Leonardo Villar, gerente del Banco de la República señaló que para volver a comportamientos normales de los precios, se requiere de mucha confianza en que el Emisor hará lo necesario para garantizar que eso sea así.
Villar se refiere a la confianza en que el Emisor cumplirá con la función que le asignó la Constitución de garantizar que la inflación se mantenga bajo control, y por eso están la expectativas de que el Banco la República va a subir las tasas de interés y las va a ir ajustando a niveles más normales de los que hay actualmente.
“El Banco –señaló Villar- no puede mantenerse indefinidamente otorgando liquidez al mismo ritmo que lo venía haciendo, y a tasas tan extraordinariamente bajas como las tuvo durante el periodo peor de la crisis”, señaló.
Fuente: El TIEMPO
