A principio de semana los clientes de una de las principales marcas de moda del mundo Zara, fueron sorprendidos con el cierre de su tienda en el centro comercial Fontanar en Chía. A este cierre, se suman otros dos puntos de Bershka y Oysho, en Santafé y Multiplaza, respectivamente, en Bogotá pertenecientes a la misma cadena.
El cierre de locales en centros comerciales es una consecuencia del efecto económico de una pandemia que llevó a la emergencia sanitaria y luego a la crisis económica de las empresas del sector comercio.
La compañía había anunciado en el mes de junio pasado, que en el periodo 2021 – 2021 cerraría entre 1.000 y 1.200 tiendas a nivel global. Este cierre afectará entre 250-300 de la marca Zara; 140-165 de Pull&Bear; 135-160 de Bershka; 110-130 de Stradivarius; 145-175 de Oysho; 100-120 de Zara Home; 110-135 de Massimo Dutti; y entre 10-15 de Uterqüe.
Según explicó Inditex, las tiendas que cerraría son aquellas que considere que su vida útil ha terminado. Esto afectará a las tiendas que no sean sostenibles o cuya facturación se puede cubrir en el canal online y las que tienen un valor contable menor de 260.000 euros. Al final de esta recomposición, el grupo se quedaría entre unas 6.300 y 6.500 tiendas.
El objetivo de Inditex es que las ventas online representen el 25% del total en 2022, lo cual traerá como consecuencia el cierre de algunas tiendas físicas, indicó la compañía con sede en La Coruña.
Zara llegó a Colombia en 2007 con la inauguración de su primera tienda en el centro comercial Unicentro Bogotá, de la mano de inversionistas panameños conocido como Grupo Harari.
De acuerdo con el Mapa del Retail, realizado por Mall & Retail, El Grupo Harari es el principal grupo de moda textil en Colombia, con unas ventas de $ 926 mil millones en 2019 en sus siete marcas, con un crecimiento del 6,6%. Sus activos en Colombia alcanzan los $ 681mil millones. Zara hace el 52,3% de las ventas, seguido de Berskha con el 16,1% y el tercer lugar es para Stradivariuss con el 14,1%. Las restantes cuatro marca hacen el 17,5%.
Sin duda las restricciones que se realizaron en el país a mediados de diciembre y enero, impactaran negativamente los resultados del año, luego de que venían de un ambiente de reactivación desde septiembre del 2020. Es por estos que los comerciantes esperan del gobierno nacional y municipal alivios con la continuación del subsidio de las nóminas, plazos en el pago de impuesto predial entre otros.
