Según la información entregada por los comerciantes mayoristas de Bogotá, Medellín y Villavicencio no se observaron afectaciones ni en el abastecimiento ni en los precios de los productos por efectos del cambio climático en el arranque de febrero.
“La oferta de productos procedente desde el interior del país como desde Antioquia y Meta fue suficiente para cumplir con los requisitos de la demanda”, señaló el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) en un reporte del impacto de las heladas en los precios mayoristas y abastecimiento.
No obstante, se indicó que para el mercado de Armenia se vieron alzas en los precios del brócoli y la coliflor procedentes de la sabana de Bogotá, donde la producción se afectó por las heladas, lo que ha ocasionado una reducción en el volumen de ingreso del producto.
“Lo mismo sucedió en el caso de la arveja verde en vaina pues se redujo la oferta a causa de una baja producción por los cambios climáticos. En el caso del brócoli el aumento de precio fue del 15 %, ofreciéndose el kilo a 3.067 pesos”, anotó el Dane en su reporte.
Por su parte, la Central Mayorista de Antioquia (CMA) precisó que sus operaciones comerciales de este lunes, 3 de febrero, observaron un normal ingreso de productos con el ingreso de hortalizas, tubérculos, frutas, abarrotes, granos, panela, huevos, cárnicos y lácteos.
“La oferta y la demanda de productos registraron un habitual movimiento mercantil (rotación), de acuerdo al volumen de abastecimiento. La Mayorista contó con algunos compradores de las grandes superficies, mini mercados, mercados Fruver (frutas y verduras) y tiendas de barrio del Área Metropolitana, municipios de Antioquia, Costa Atlántica y Chocó”, se informó en un comunicado.
A la CMA ingresaron 265 vehículos de carga, equivalentes a 2.385 toneladas de productos. Se anotó que el lunes, es un día en el que disminuye el volumen de abastecimiento de alimentos desde los centros de producción, debido al descanso laboral de los agricultores el fin de semana.
Las heladas son un fenómeno meteorológico en el que se registran descensos de la temperatura inferiores a los 0 grados centígrados, lo que hace que el agua o el vapor que está en el aire se congele y se deposite en forma de hielo en la superficie de la tierra.
Esta es una condición que se observa habitualmente en enero en los departamentos de Boyacá, Cundinamarca, Antioquia, Nariño y los Santanderes, al ser este uno de los meses más secos del año, cuando predominan las temperaturas por encima de lo habitual durante el día y muy baja nubosidad, lo que genera un descenso de la temperatura en la madrugada que puede quemar las plantas.
