Schneider Electric, organización líder en la automatización y la transformación digital de la gestión eficiente de la energía, dio a conocer que el 86% de las personas consideran que el cambio climático tendrá un gran impacto en el incremento del valor de las facturas
de energía.
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Igualmente, 9 de cada 10 consideran que cada individuo deberá asumir un papel más
relevante frente al cambio climático.
Los principales hallazgos del estudio del consumidor son:
7 de cada 10 (72 %) consumidores consideran que la reducción de la huella de carbono debe ser una prioridad personal.
Más de la mitad (55 %) consideran que es prioritario que sus hogares avancen a entornos de cero emisiones netas. Sin embargo, menos de un tercio (31 %) cree que es probable que esto suceda.
Más de la mitad de los encuestados (55 %) considera que es responsabilidad de cada
individuo abordar el cambio climático.
“En una realidad en la que el precio del suministro de energía está en aumento, en la que produce un gran incremento del costo de vida, y en la que se confirma un mayor uso de dispositivos y de vehículos eléctricos, la administración de la energía en los hogares se convierte en una labor prioritaria tanto para consumidores, constructores, empresas y gobiernos.
Son indicadores que confirman que existe una gran voluntad para hacer cambios, sin embargo, se evidencia un gran pesimismo sobre la diferencia que se puede marcar” afirma Jaap Ham, Profesor Asociado de Ingeniería Industrial y Ciencias de la innovación en la Universidad Tecnológica de Eindhoven.
De acuerdo con el experto, el futuro estará en nuestras manos, siempre y cuando se establezcan mecanismos para que las viviendas sean más sostenibles. Esto, será posible con la ayuda de tecnologías modernas para la administración de energía en el hogar (HEM). Para el funcionario, la mayor barrera para el cambio en este momento es la forma de pensar.
Hemos creado obstáculos psicológicos que nos hacen eludir la responsabilidad de actuar.
Estos hallazgos muestran que a medida que adoptamos soluciones digitales inteligentes para luchar contra un enemigo invisible (administración y consumo de energía), reemplazamos los combustibles fósiles con electricidad inteligente y limpia en las dietas energéticas de nuestros hogares.
Esto confirma la forma en la que podemos hacer una contribución significativa a nuestra lucha mundial por un planeta más sano.
Además, deberíamos ser capaces de hacer el bien por el medio ambiente sin comprometer
nuestra comodidad” completa Ham.
El estudio ha confirmado que los consumidores buscan implementar estilos de vida sostenibles, lo cual les permite establecer a la eficiencia energética en el hogar como una gran prioridad.
El 40% de los encuestados cree que las tecnologías inteligentes permitirán que los hogares sean más sostenibles.
Más de la mitad de las personas encuestadas (54 %) espera que su nuevo hogar o
apartamento esté equipado con dispositivos inteligentes para el hogar, un aumento del 13% con respecto a investigaciones realizadas anteriormente (2020).
Los propietarios de dispositivos que hayan experimentado los beneficios de la tecnología inteligente y la hayan incorporado a sus estilos de vida, están dispuestos a gastar al menos el doble.
Elementos de iluminación inteligente y los termostatos se encuentran entre los tipos de
dispositivos inteligentes con más índices de compra.
El aumento del costo de vida y la gestión del consumo de energía son factores que fomentan en los consumidores, la adopción de medidas inteligentes y la inversión en soluciones sostenibles.
