En este versus, enfrentamos a dos pesos pesados: Tor y VPN ¿Cuál se adapta mejor a tus necesidades? Te lo contamos aquí.
Las personas que desean mantener privadas sus actividades en línea a menudo se enfrentan a la pregunta: ¿debo usar una red privada virtual ( VPN ) o la red de anonimato Tor ? ¿Cuáles son las ventajas y desventajas de cada uno? Definitivamente hay mucho por lo que pasar antes de tomar una decisión. Espera un minuto, ¿por qué elegir solo uno cuando, quizás, puedes tener lo mejor de ambos mundos? ¿Puede?
En primer lugar, sin embargo, veamos qué ofrece cada uno de ellos y en qué se diferencian.
Tor versus VPN: ¿cómo se comparan?
Si bien estas son herramientas que se utilizan para la protección en línea, es importante comprender que Tor y las VPN tienen propósitos diferentes.
Tor se centra en el anonimato. Se basa en una red de servidores, conocidos como nodos Tor, que se encuentran en todo el mundo. Estos servidores son creados por personas y organizaciones voluntarias que asignan sus recursos, computadoras y ancho de banda de Internet para respaldar las operaciones de la red.
Tor funciona conectándote a una red aleatoria de, al menos, tres nodos: un nodo de entrada que sabe quién eres, pero no a qué información estás llegando; un segundo nodo (o más) a través del cual pasa el tráfico para mayor anonimato; y un nodo de salida final que se conectará directamente a la página que solicitó.
Debido a que los nodos de salida brindan su propia información para llegar al destino final, Tor solicita voluntarios que den un consentimiento especial para ser utilizados en este paso final. En pocas palabras, si un usuario aleatorio de Tor está tratando de realizar algún tipo de actividad ilegal, será la persona que ofrezca el nodo de salida la que podría identificarse como el abusador.
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Sin embargo, para la mayoría de los usuarios, el anonimato que ofrece Tor podría no ser necesario. Varios sitios web comunes bloquean el tráfico proveniente de Tor y la experiencia del usuario es mucho más lenta de lo que la mayoría de la gente está acostumbrada. Por esta razón, las VPN pueden servir en la mayoría de los casos de uso, a pesar de no estar enfocadas en brindar anonimato a sus usuarios.
Los proveedores de VPN confían en una red de servidores dedicados. Una vez que se haya conectado a ellos, su dirección IP se ocultará de los sitios web que visite y solo la VPN que esté utilizando conocerá su identidad real. La mayoría de las VPN de buena reputación afirman no mantener registros de su actividad en línea, pero como se mencionó anteriormente, no brindan anonimato.
Las VPN también tienen la ventaja de permitirle elegir la ubicación del servidor al que se está conectando, lo que le permite eludir las restricciones de contenido en ciertos países para acceder a sitios web bloqueados o contenido local diferente en plataformas de transmisión.
Entonces, ¿puedo usar tanto Tor como una VPN?
¡Técnicamente, sí! Y con gran ventaja. Sin embargo, hay diferentes maneras de hacer esto. El más obvio es conectarse primero a su VPN y luego ir al navegador Tor. «Tor sobre VPN», como se le llama, no permitirá que su ISP sepa que está conectado a la red Tor, agregando una capa más de privacidad. Asimismo, también está protegiendo su dirección IP contra posibles amenazas maliciosas.
Por otro lado, la documentación oficial de Tor desaconseja esta solución a menos que sepa lo que está haciendo. Y es fácil entender por qué. Mientras oculta su actividad a su ISP, no la oculta a su proveedor de VPN: simplemente elige confiar en este último y espera que no registre sus registros de metadatos. Además, las conexiones VPN a veces pueden caerse (sin alertarlo necesariamente), exponiendo su uso de Tor a su proveedor de VPN, aunque sea por breves momentos.
Tenga en cuenta que si se encuentra en un país donde Tor es ilegal, es posible que su ISP deba notificar a las autoridades gubernamentales sobre los clientes que usan Tor. Aquí es cuando podría ser recomendable usar Tor sobre VPN o ejecutar un puente Tor . Esto también podría salvarlo de caer en trampas inesperadas .
Conclusión
Al final, no se trata necesariamente de uno contra el otro, sino sobre todo de cómo diferentes personas pueden aprovechar ambas soluciones según sus necesidades en un momento dado.
Para la mayoría de los usuarios, una VPN hará el trabajo. No porque sea más privado, sino porque la mayoría de la gente necesita privacidad, en lugar de anonimato. Las VPN son buenas para proteger a los usuarios del seguimiento de su actividad en línea o cuando usan Wi-Fi público , al tiempo que se benefician de la velocidad y el contenido disponible en la web superficial.
Pero para aquellos que buscan el mayor anonimato posible, Tor es la solución. Y si bien la red es bien conocida por permitir el acceso a la web oscura, su objetivo principal es servir como puerta de entrada para escapar de la censura , lo que, en cualquier caso, debe hacerse con cuidado .
Cualquiera que sea la solución que más le convenga, tenga en cuenta que su privacidad comienza con usted mismo. Así que siempre tenga cuidado con la cantidad de datos personales e información sobre usted que comparte en línea. De lo contrario, ninguna capa adicional de protección lo ayudará.
