Luego de tres jornadas de negociación voluntaria, este jueves la red de pagos Transbank alcanzó un acuerdo con su sindicato de trabajadores, lo que permite dar término a una huelga que se extendió por nueve días. El proceso fue facilitado y mediado por la Dirección del Trabajo.
La empresa aseguró haber hecho un gran esfuerzo en medio de su difícil situación financiera, con tarifas (comisiones a los comercios) que se encuentran congeladas por las autoridades desde abril de 2020.
En esa línea, el gerente general de Transbank, Patricio Santelices, señaló que una de las preocupaciones de la empresa era “no afectar a los comercios afiliados y usuarios de tarjetas que forman parte de la cadena de pagos del país, particularmente de cara al fin de semana de Fiestas Patrias, que para miles de pymes es una oportunidad de reactivación tras un año y medio de pandemia”.
La red de adquirencia originalmente había propuesto posponer la negociación por un año, cuando estuviese despejada la incertidumbre respecto de las tarifas.
En un comunicado, la compañía informó que el acuerdo contempló un bono de término de conflicto de $3.000.000 por un período de dos años y mejoras en los beneficios para sus trabajadores.
Los primeros días de la huelga legal de los funcionarios de TBK coincidió con una caída en la red de pagos durante algunos minutos de la tarde del jueves 10, lo que generó aglomeraciones en supermercados y tiendas.
¿Por qué es importante está noticia? Transbank es clave para el buen funcionamiento del ecosistema de pagos en Chile, ya que provee de los equipos y sistemas para poder pagar con tarjetas en el comercio. Durante muchos años fue prácticamente el único actor de la industria. Con la transición al modelo de cuatro partes, mantiene el liderazgo atendiendo a más de 220 mil comercios de todos los tamaños, incluyendo fintech que están conectadas a su red.
Diariamente más de 8 millones de transacciones se realizan a través de sus POS, Webpay y el resto de los productos que ofrece la empresa.
