Mercado inmobiliario también se centra en la conservación del patrimonio arquitectónico

patrimonio arquitectónico

En Chile, desde hace un tiempo ya, se ha demostrado la constante preocupación por el patrimonio arquitectónico, ya que aporta a la construcción de la identidad nacional y proporciona efectos positivos que conllevan la conservación y mantención.

El proyecto Espacio Huérfanos se encuentra en el límite entre Barrio Brasil y Barrio Yungay, un sector patrimonial, es decir, un lugar de conservación histórica, por lo que el proyecto es un Patrimonio Arquitectónico y Cultural que conserva estilos arquitectónicos republicanos y clásicos de la época colonial. La fachada completa y el interior (6mts que circundan el área) son conservados con los muros, adobe y vigas originales, mismo estuco y colores, donde no se demolió nada de lo preservado y se asumió el desafío de estar a la vanguardia y a la vez proteger el patrimonio.


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Patrimonio arquitectónico

El Consejo de Patrimonio requiere que para construir cualquier proyecto inmobiliario se realice dentro de la estructura original, y Espacio Huérfanos se aventura y decide hacerlo. Jaime Migone es el arquitecto conciliador entre el Consejo de Conservación Histórica y Cultural y los gestores del proyecto; él fue quien veló por el cumplimiento de todas las condiciones.

“Conservar el patrimonio arquitectónico, no solamente porque la Ley 17.288 así lo señala, en el caso de una Zona Típica como esta, sino porque, sin duda los valores culturales, urbanos y arquitectónicos asociados al barrio, le entregan al nuevo proyecto una riqueza que por sí solo, no posee. Demoler el patrimonio arquitectónico, por muy modesto que sea, no es eficiente ni rentable. Los proyectos contemporáneos que consideran poner en valor la preexistencia arquitectónica y urbana, son mucho más estimados y rentables en los centros históricos de las ciudades. Este diálogo entre lo nuevo y lo antiguo es muy valioso con resultados mucho más ricos que la simple suma de ambos. Poner en valor el patrimonio existente con intervenciones contemporáneas, genera resultados que la comunidad reconoce y aprecia”, comenta el arquitecto asesor a cargo del área patrimonio, Jaime Migone Rettig.

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Hermosear el barrio, mantener la identidad, hacer comunidad, generar empleo y tener acceso a todo ello es la carta de presentación de quienes están detrás de este proyecto que sale de lo común, ya que no sólo se entregan viviendas, es toda una experiencia a la que todos tienen acceso a vivir. “La mezcla entre lo moderno y lo antiguo no ha sido fácil de llevar porque nuestra primera mirada siempre ha sido proteger y conservar hasta el más mínimo detalle, pero a la vez debíamos lograr tener un espacio en el que la gente sepa que puede vivir cómodamente. Nos sentimos orgullosos de los resultados porque lo logramos después de mucho esfuerzo y constancia. Tenemos la mezcla perfecta entre el cuidado del patrimonio y el bienestar de las personas que viven o que decidan vivir dentro de este proyecto”, afirma Pablo Grez, Gerente General del proyecto.