El Tribunal de Justicia de São Paulo (TJ-SP) ordenó a la plataforma de reservas de alojamiento Booking compensar a los clientes por daño moral por haber cancelado sus reservas para las fiestas de fin de año sin informarles previamente.
La empresa deberá pagar 2.500 reales a cada uno de los tres consumidores que presentaron la demanda pidiendo una indemnización. El caso ocurrió en una pensión de Ubatuba, en la costa norte de São Paulo.
Según se informó en el proceso, los consumidores llegaron a registrarse en la posada, pero minutos después sus reservas fueron canceladas y fueron expulsados del lugar sin recibir asistencia alguna por parte de la plataforma responsable de la reserva. Los clientes también afirman que fueron agredidos físicamente y amenazados por el dueño del establecimiento.
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El caso ya había sido juzgado en primera instancia, cuando se ordenó a Booking devolver a los clientes el importe pagado por el alojamiento, alrededor de R$ 2.000.
El caso está pendiente en los Tribunales de São Paulo desde 2022, pero fue juzgado en segunda instancia en noviembre de este año. El juez Gomes Varjão, ponente del recurso de apelación, resolvió que la empresa es responsable de lo ocurrido por ser parte de la cadena de consumo.
Para el juez, los hechos narrados por los consumidores “superan los vividos en la vida cotidiana y exceden lo razonablemente esperado en la vida comunitaria”.
Booking asegura que ya no tiene contrato con el establecimiento
En un comunicado, Booking aseguró su “compromiso de cumplir la decisión judicial” y afirmó que ya no tiene contrato con el establecimiento implicado en el caso.
“Resaltamos que, en Booking.com, nuestro objetivo es facilitar experiencias de viaje fluidas y placenteras a nuestros clientes y, cada semana, habilitamos millones de estancias, la gran mayoría transcurriendo sin ningún problema. Nuestro equipo de atención al cliente está siempre disponible para ayudar a los viajeros y se puede contactar con él a través del Centro de ayuda.
Respecto a este caso concreto, Booking.com es consciente de lo ocurrido y lamenta la situación denunciada por los demandantes. Además de nuestro compromiso de cumplir con la decisión judicial, confirmamos que Booking.com ya no tiene contrato activo con la propiedad involucrada, por lo que el alojamiento ya no está disponible para reservar en la plataforma”.
Con información de Mercado e Consumo
