El grupo chileno de grandes almacenes, Falabella, enfrentó dificultades financieras en el primer semestre, registrando una pérdida de 5.153 millones de pesos chilenos. A pesar de mantener un sólido desempeño en su negocio bancario, la compañía experimentó una disminución del 9,5% en sus ingresos, lo que resultó en números rojos. Durante el período de enero a junio, Falabella facturó 5.435.960 millones de pesos chilenos, principalmente afectado por sus negocios no bancarios, que sufrieron una caída del 13%. En contraste, su negocio bancario logró aumentar sus ingresos en un 11,8%.
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El grupo opera en diversas áreas, como tiendas por departamento, negocio online, Sodimac, Tottus, Mallplaza y Banco Falabella. Sin embargo, algunas divisiones tuvieron un rendimiento negativo en este semestre, especialmente las tiendas de hogar en Chile, con una disminución del 23%, y las tiendas departamentales en el mismo país, que experimentaron una caída del 18,3%, así como las de Colombia, con un declive del 30,9%. Falabella se vio afectada por el deterioro del negocio minorista en varios mercados, aunque Mallplaza logró un aumento del 13,3% en su facturación.
La situación económica también impactó a los mercados en los que Falabella opera, con disminuciones del 4,2% en Perú, 16,6% en Colombia, 21,4% en Argentina y 16,2% en Brasil. Esta disminución de ingresos llevó a una contracción del 16,9% en la ganancia bruta y a un cambio de resultados netos positivos en el año anterior a pérdidas de 5.153 millones de pesos en este semestre. La compañía adoptó un modelo de valoración «a valor razonable» de sus propiedades y finalizó el período con una red de 526 establecimientos en varios países, incluyendo Uruguay, subrayando la necesidad de normalizar sus niveles de inventario y mejorar los márgenes de negocios no bancarios.
Con información de Moda.es