Con el ingreso este año de Argentina a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, se crean para el país sudamericano mejores perspectivas para la asociación con los demás países del grupo, China especialmente.
Uno de los campos más relevantes para el desarrollo de proyectos conjuntos es el de la infraestructura. Se trata de un sector en el que China tiene excepcionales medios para ofrecer y que Argentina necesita incrementar para potenciar su economía.
“Los recursos disponibles de la Argentina son inmensos, y son particularmente adaptables a las necesidades del pueblo y del sistema industrial y productivo chino. Actualmente hay un déficit de infraestructuras que es un límite al crecimiento y a la expansión de la producción y a la creación de riqueza”, asegura Fernando Fazzolari, presidente de la consultora en ingeniería de Argentina IATASA, que desde hace años trabaja con empresas chinas.
Los servicios que ofrecen las consultoras locales resultan de gran importancia para las compañías chinas que deben desenvolverse en un país como Argentina, con procedimientos, un marco regulatorio, una mentalidad empresarial y un entorno general muy diferente al chino.
La consultora en ingeniería de Argentina IATASA, que cuenta con más de sesenta años de experiencia en las mayores grandes obras de infraestructura del país, se ha instalado como una de las referentes en su campo para empresas chinas.
Fazzolari informa que IATASA ha elaborado para China Railway Construction Corporation Limited (CRCC) el estudio de impacto ambiental para la renovación de vías de cuatro tramos del Ferrocarril San Martín Cargas, que representaron 1.600 kilómetros entre Cabred, en la provincia de Buenos Aires, y la provincia de Formosa.
Junto con la empresa Tractebel, también asistió en la oferta de dos grandes proyectos hidroeléctricos para Sinohydro y con Concremat (firma perteneciente al grupo China Communications Construction Company Ltd., CCCC) llevó a cabo tareas vinculadas con inundaciones y provisión de agua potable en la provincia de Buenos Aires.
IATASA es una de las empresas que forman la Cámara Argentino-China de Producción, Industria y Comercio (CACPIC), y Fazzolari tiene a cargo la Comisión de Infraestructura, Minería e Industrias de la entidad.
El consultor detalló también que su firma trabaja con la China Water Resources Beifang Investigation, Design and Research Co. Ltd. (BIDR), ha dado soporte a CRIG-CREG (China Railway International Group Ltd.-China Railway Engineering Equipment Group Co Ltd) en la construcción del viaducto del Ferrocarril Belgrano Sur y ha realizado el estudio de una línea de alta tensión en conjunto con BIDR para brindar energía a la minera Liex en la provincia de Catamarca.
En virtud de la amplia experiencia de ambas instituciones, la consultora IATASA también ha firmado un convenio de colaboración con el Instituto del Agua de Beifang para el desarrollo conjunto de tareas de ingeniería.
La cooperación en infraestructura ha crecido entre Argentina y China, y hay sectores que trabajan activamente para que siga incrementándose.
En junio pasado, la directora ejecutiva de la CACPIC, Alejandra Conconi, presentó un “Informe de Oportunidades y Negocios con China” en el que reunió el trabajo de seis comisiones y más de 60 socios que, “colaborativamente, nos ayudaron a hacer un mapeo de las oportunidades, que son infinitas”.
La cooperación en infraestructura se construye sobre la base del comercio bilateral, que en los últimos 20 años pasó de 1.000 millones de dólares a cerca de 20.000 millones, según indicó el subsecretario de Promoción del Comercio e Inversiones de Argentina, Pablo Sívori.
Para sustentar una mayor colaboración, los empresarios argentinos que promueven la asociación estructural con China destacan la importancia del ingreso de Argentina a la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
El coordinador de la comisión de Energía y Minería de la CACPIC, José de Castro, indicó que “con la incorporación de Argentina, se coloca al país como uno de los Estados clave para las aspiraciones de un cambio en el sistema económico global, un sistema mucho más interrelacionado”.
Por su parte, Fazzolari destacó la gran cantidad de obras de infraestructura vinculadas a la energía que “son indispensables para acompañar el incremento de la producción”. Entre las obras, mencionó una central atómica, parques solares y eólicos, la explotación gasífera y petrolera, los puertos y la conectividad.
Fazzolari declaró que “Argentina y China son dos países complementarios y que pueden emprender un desarrollo conjunto exitoso en virtud de los conceptos de cooperación y ganancia compartida, particularmente en la búsqueda de una humanidad de pueda generar situaciones de justicia y bienestar social para grandes sectores de la población.”
Asimismo, destacó la importancia de “la inversión de capital directa para lograr movilizar una economía que vivió largo tiempo estancada por las barreras arancelarias y no arancelarias de los países centrales de Occidente.”
En este sentido, el empresario enfatizó que “abrir las fronteras a las oportunidades de la Iniciativa de la Franja y la Ruta es, sin duda, un puente importante para el crecimiento de las relaciones Sur- Sur, que están siempre postergadas”.
Al poner la experiencia de IATASA al servicio de una mejor cooperación con empresas chinas, Fazzolari evalúa los desafíos que aparecen en el camino de la materialización de los proyectos.
“La vocación de invertir en Argentina por las empresas chinas puede llegar a estar amenazada por la inestabilidad política del país y sus consecuencias económicas”, sostiene, aunque aclara que “las inversiones de carácter estratégico son necesarias en el país para que su desarrollo económico sea más estable”.
“Una forma de lograrlo”, comenta, “es poder brindar apoyo financiero en atención a los compromisos con el Fondo Monetario Internacional, que en este momento está sometiendo a Argentina a políticas restrictivas y limitantes de su crecimiento”.
Por otra parte, indica que “en lo que hace a los cambios de rumbo permanentes de la economía argentina, las empresas chinas deben buscar asesoramiento experto tanto en sus aspectos contractuales como económicos y políticos, y tener siempre un equipo de comunicación que los acompañe en sus gestiones”.
El consultor agrega que “a su vez, deben mejorar la vinculación con las empresas locales. Es importante buscar políticas asociativas, de manera que las empresas chinas se puedan integrar más fácilmente a los estilos y formas locales de gerenciar los trabajos y a su vez ir comprendiendo la lógica propia de Argentina. Se trata de un país que tiene un alto grado de alfabetización y capacidades muy versátiles y con gran adaptabilidad a los cambios, lo que convierte a los técnicos y economistas argentinos en gente con mucho entrenamiento frente a situaciones variables y sorpresivas”.
El trabajo de asesoría a compañías chinas en Argentina le permite a este empresario asegurar que “las mejores condiciones para generar sinergia entre empresas de nuestros dos países es lograr la confianza entre ellos. Tanto una parte como la otra siempre deben encontrar una escucha atenta, respetuosa e inteligente frente a cada problema que se presenta. La importancia de este aprendizaje es sustancial para el buen curso de los negocios y de los emprendimientos”.
Fuente: Spanish.peopledaily
