La compañía decidió bajar las persianas dos días antes de la fecha anunciada. Desconcierto entre los clientes. Cuál será el futuro del paseo de compras.
Falabella cerró definitivamente sus puertas al público el lunes por la noche, dos días antes de la fecha anunciada, y este martes fueron varios los clientes que llegaron al Mendoza Plaza Shopping y se sorprendieron con sus persianas bajas y carteles apagados.
Con el cese de operaciones definitivas de la tienda de retail, una de las grandes atracciones del paseo de compras de Guaymallén, ahora la incertidumbre se centra en qué pasará con el gran local que ocupó durante 28 años y el impacto que tendrá en el resto de los negocios.
El grupo IRSA, propietario del Mendoza Plaza, analiza desde hace meses qué marca podría desembarcar y que ofrezca a sus visitantes un perfil similar a la compañía de capitales chilenos.
Después de muchas idas y vueltas, las versiones más fuertes apuntan a que no sería una, sino tres las empresas que se instalarán en el mall: una de venta de artículos deportivos, un bazar y un reconocido supermercado de productos para el hogar y la construcción.
La idea es que dos de ellas compartan los niveles superiores y la restante ocupe la planta baja, ya que en total son 9.000 metros cuadrados.
Desde la gerencia del Mendoza Plaza Shopping no se refirieron a las negociaciones que, según otras fuentes del mercado, se mantienen en estricto secreto.
Desconcierto entre los clientes
Falabella anunció que el 31 de marzo dejaría de operar en la provincia. Sin embargo, el lunes les comunicaron a los pocos empleados que quedaban activos que ya no volvieran. Algo similar ocurrió en las provincias de Córdoba y San Juan.
“La despedida fue dura”, aseguraron quienes estuvieron allí y comentaron que no faltaron las lágrimas y los abrazos del personal.
Una de las postales más significativas del final se vivió este martes cuando un hombre de seguridad comenzó a dar por handy las coordenadas de los carteles con promociones que aún seguía prendidos.
Precisamente, a las 11.15, se produjo el apagón total de la pantalla ubicada en la planta baja.
La escena fue observada por madre e hija que se quedaron desconcertadas al llegar al espacio y ver la cortina metálica desplegada.
“¿No va a abrir?”, se preguntaron algo atónitas.
Algo similar le sucedió a una mujer que ingresó rápidamente por la puerta principal del shopping hablando por celular y comentándole a su interlocutor que iba a Falabella: “Voy a ver si consigo una malla”.
Mientras tanto, en el interior del local se podían ver góndolas vacías y maniquiés desnudos, y en el piso superior algunos productos rezagados de la sección perfumería.
Retiro del país
El pasado 14 septiembre Falabella hizo pública su intención de salida de la Argentina y comunicó que buscaba un socio estratégico para sus negocios en el país. A la par que comenzó a ofrecer retiros voluntarios a sus trabajadores.
“La pandemia aceleró el proceso de digitalización del retail y ha afectado sus resultados. Para adaptarse a esta nueva tendencia y hacer sustentable la operación en el tiempo, Falabella y Sodimac han determinado cerrar cuatro de sus tiendas en Buenos Aires en los próximos meses”, comunicó por esas épocas la compañía chilena que comanda la familia Solari.
La empresa poseía 10 tiendas en Argentina, a las que se suman 9 sucursales de Sodimac.
Finalmente, esta semana también se informó que el proceso se modificó y el grupo no decidió avanzar en el cierre de Sodimac y conservar seis puntos de venta ubicados en el Área Metropolitana de Buenos Aires y Córdoba como consecuencia de un contexto económico más favorable para el sector de la construcción.
